Gran polémica causó el libro “100 preguntas sobre sexualidad adolescente”, realizado por la Municipalidad de Santiago y patrocinado por el Ministerio de Salud, texto que subraya entre otras cosas que “la pastilla del día después no es abortiva” y donde se alude a materias como la masturbación y el sexo anal.

Precisamente sobre este último tema se explayó Ossandón, asegurando que en lo que considera una correcta educación sexual no debe incluirse esta práctica. “Para mí, el sexo anal, como dicen, no es sexo. Eso es otra cosa. Yo no sé si están tratando de meter alguna ideología o algo”.

Sobre este tema y más conversó el periodista Mirko Macari en su tradicional columna “Mejor no hablar de ciertas cosas” en el Podría Ser Peor.

Respecto a la cuestionada frase del senador, el periodista señaló que tiene tribuna en los medios Ossandón y Tohá.

“En esta época gobernar es comunicar, hacer política es comunicar. Entrar a los medios para los candidatos a lo que sea, es importante. Y gana Tohá quien debería estar dando explicaciones por SQM y termina de heroína del progresismo defendiendo un manual de sexualidad frente a la derecha retrógrada y conservadora”, dijo.

Agregó que no deja de sorprender que a estas alturas del desarrollo de la humanidad, la derecha chilena tenga tanto problema para hablarle a los niños y jóvenes de sexo.

“Eso te habla de lo retrógrada en general que es la derecha (…) todos pueden tener sexo con todos mientras no hablen de eso. Hablar de ciertas cosas para la derecha es muy complicado. Tienen esa veta hipócrita en estos temas conservadores propia de su acervo con la cultura católica dominante en ese sector”, sostuvo.

Añadió que ese argumento protector para hablar de sexo con los jóvenes, e incluso niños, es muy propio de este bloque político.

“Es algo muy propio del catolicismo que predica lo que debe hacer la gente en materia de moral sexual y que no práctica”, señaló.

Además, precisó que quienes sostienen este pensamiento es la derecha dominante e importante, siendo la columna vertebral del conglomerado.

Respecto a la formalización de Marco Enríquez-Ominami, Macari precisó que no le resultó guardar silencio para cuidarse del resultado de la investigación judicial.

“Su estrategia falló, todo el tiempo que guardó silencio le hizo pagar un alto costo profesional. Su profesión es ser candidato. Hoy afortunadamente le sirve esta formalización para sacudirse, estamos viendo al mejor Marco en su peor momento, en toda su potencia comunicacional, en su estilo agresivo, duro, pero en su peor momento porque es difícil creerle”, aseveró.

Añadió que ME-O quiere hacer pagar un costo a la fiscalía con esta formalización por lo que ha atacado a Pablo Gómez utilizando buenos argumentos comunicacionales para dejarlo timbrado. “Tú repites tanto algo en comunicación que suena como cierto, es axioma”, sostuvo.

Escucha la entrevista realizada por Julio César Rodríguez en el Podría Ser Peor: