La Conferencia Episcopal no descartó que la presencia en Chile del arzobispo de Malta, Charles Scicluna, pueda extenderse más allá de este viernes, luego de la operación que se le realizara tras sufrir complicaciones a la vesícula.
Scicluna, que encabeza la misión papal para verificar la relación entre el obispo de Osorno, Juan Barros, con el sacerdote pederasta, Fernando Karadima, ha tenido un buen postoperatorio y “se encuentra de buen ánimo”, dijo el vocero de la Conferencia Episcopal, Jaime Coiro.
El periodista explicó que su recuperación tiene un “buen pronóstico”, no descartando, sin embargo, que el religioso maltés pueda estar internado hasta el próximo sábado.
“Se ha comunicado con su arquidiócesis, con el padre Bertomeu y con el nuncio”, agregó Coiro.
Continúan las entrevistas
El estado de salud de Charles Scicluna no ha impedido que continúen desarrollándose las entrevistas con quienes han sido citados, o han pedido participar en el proceso, que ahora es encabezado por el sacerdote español Jordi Bertomeu, también integrante de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Sin embargo, hasta ahora se desconoce si el obispo Barros ha prestado declaración ante la misión de notarios, información que tampoco quiso ser confirmada por el vocero de la Conferencia Episcopal, quien precisó que “no tenemos información sobre las personas que han sido parte de las audiencias”.
Jaime Coiro explicó que, independiente de quién encabece las conversaciones, el informe emitido llevará la firma de Charles Scicluna y llegará a manos del Papa, para determinar o no la pertinencia del inicio de un proceso canónico contra Juan Barros Madrid.
