Durante enero, el Instituto Libertad -el Think Tank ligado a RN- terminó la elaboración de “El mapa del Estado”, un reporte que reúne el trabajo de un año donde identificaron 1.700 cargos del sector público que la próxima administración Piñera podría remover.

Según lo señalado por el director ejecutivo de la entidad, Aldo Cassinelli, desde ese grupo se desprenden al menos 800 cargos en cuya designación primó un factor político.

En tanto, de acuerdo a lo reportado por La Segunda, el listado ya fue entregado al futuro ministro del Interior, Andrés Chadwick, y en las próximas semanas llegará a los demás miembros del gabinete. De hecho, llegó a manos del presidente de RN y próximo ministro de Vivienda, Cristian Monckeberg; a lo que se habrían sumado conversaciones con los titulares designados de Desarrollo Social y Agricultura, Alfredo Moreno y Antonio Walker, respectivamente.

El texto detalla, en 225 páginas, los cargos de planta de cada entidad pública, incluyendo ministerios, intendencias y gobernaciones. En el caso del Ministerio de Obras Públicas, se incluye el jefe de gabinete, jefes de división, jefes de unidades y departamentos. Incluso, también se consideraron las gerencias de Metro S.A.

“El objetivo es entregarle a las autoridades que están asumiendo, tanto al Presidente como a su equipo político, un instrumento, una herramienta que les permita mirar de manera completa todo el Estado”, señaló Cassinelli.

“Tienes que saber cuáles son los cargos que tienes que proveer. Cuántos cargos son, dónde están, cuáles son las relaciones que tienen que tener cada uno de ellos en términos de competencia, de conocimiento. Es el primer objetivo para el cual fue diseñado este instrumento”, añadió.

Eso sí, admitió que no es llegar y sacar funcionarios de planta, pero se mostró optimista sobre cómo proceder. “Hay muchos de ellos que renuncian o puedes mover (…) Hay que ver el nombramiento, el periodo y la posibilidad de que la remoción sea por evaluación o por indemnización”.

Asimismo, explicó que alrededor de 500 consideran una evaluación, debido a que en ellos es importante es dar continuidad al funcionamiento del Estado, como -por ejemplo- se da en el caso del director de administración y finanzas en cualquier entidad pública.

Para cerrar, también se dio tiempo para advertir que todos los cambios serán progresivos a medida que la próxima administración se instale. “Esto no necesariamente tiene que completarse el 11 de marzo. Es probable que los cambios en general se concreten en el transcurso del año. Incluyen cargos por Alta Dirección Pública y otros que no lo son”, señaló.