Expertos del Observatorio de Sostenibilidad de la Universidad de Chile, a través de un comunicado, llamaron a las autoridades a la reflexión sobre el “evidente” impacto que tuvo el sistema forestal chileno, en medio de los incendios vividos en la zona centro sur.

Ante esto, los especialistas dicen que su “mayor preocupación es que se opte por una solución fácil y de corto plazo. Esto es, que se reforesten las áreas afectadas de bosque nativo con especies forestales exóticas“.

Y es que el futuro de los bosques autóctonos que resultaron siniestrados aún es incierto, puesto que cabe la posibilidad de que, en esos lugares, se instalen forestales, con el fin de plantar especies que, según estos mismos especialistas, podrían llegar a ser muy dañinas para el ecosistema.

El Observatorio añade que “Chile, históricamente, ha perdido una gran proporción de sus bosques en la zona central, por lo que el enfoque debe ser recuperar los afectados y no reemplazarlos”.

Efectos del fuego

Lejos del obvio daño que produjeron las llamas a las miles de familias que se vieron afectadas en el territorio nacional, los especialistas comunican que existe un efecto determinante en la biodiversidad de los bosques chilenos.

“La catástrofe ha generado efectos sobre la cubierta forestal de plantaciones y de vegetación nativa, acelerando el proceso de desertificación y alterando el ciclo de nutrientes; así como la muerte y/o el desplazamiento de animales desde su hábitat y alteraciones en la composición de especies del bosque nativo”, detallan.

Así, la recuperación de toda la biodiversidad en un bosque quemado, podría tardar entre 15 a 30 años en el caso del bosque esclerófilo (de litre, peumo, quillay o boldo), y más de 50 años en bosques de robles.

Además, aclaran que los efectos nocivos que podría tener la cantidad de dióxido de carbono emanada de los incendios hacia la atmósfera es aún una cuestión de estudio.

Por esto, el Observatorio recomienda a las autoridades y organismos del sector “realizar una investigación acuciosa y entregar a la opinión pública un balance preciso de los daños, así como de las políticas que van a aplicar para recuperar la superficie dañada”.

Llaman al Gobierno a considerar “planes de incentivos para reforestar con especies nativas”, puesto que, según ellos, consume agua en menor cantidad que las especies exóticas, y disminuyen la evaporación del suelo.

“Restitución de especies nativas”

El Observatorio de Sostenibilidad pide “a las autoridades que, en el plan de recuperación de esta catástrofe, se hagan los mayores esfuerzos para que en las áreas con aptitud forestal afectadas se restituyan las especies nativas, tanto de árboles como arbustos”.

Aunque también proponen que, en aquellas zonas donde ya exista monocultivo, se incentive el desarrollo de plantaciones mixtas. De esta forma, convivirían pinos, eucaliptos y especies arbóreas nativas.

Esto, dicen, “como alternativa a la solución que probablemente darán las empresas privadas”, puesto que proyectan que “tratarán de reponer rápidamente la superficie afectada con especies forestales exóticas, debido principalmente, a que ofrecen un retorno económico más rápido“.

Por lo anterior, emplazan al Estado a que aplique “una nueva visión para el sector y modificque la actual política de fomento forestal”.

La pregunta

Según los especialistas del Observatorio, “llegó el momento de plantearse la pregunta sobre qué modelo de desarrollo forestal necesitamos para los próximos 20 a 30 años”.

Al menos, según ellos, “el nuevo modelo de desarrollo forestal debe ser parte sustancial del nuevo enfoque de crecimiento sostenible”, destinado a lo “ético y de equilibrio global, lo que significa producir de manera segura en el largo plazo, con el menor impacto ambiental y social posible”.