“El automóvil amarillo” obtiene el primer lugar en el III Concurso de Dramaturgia 2015

Cristian Opazo | Agencia Uno
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La obra “El automóvil amarillo” de Sally Campusano ganó la tercera versión del Concurso de Dramaturgia, cuyo premio consistirá es montar esta obra como parte de la Temporada oficial 2017 del Teatro Nacional Chileno (TNCH).

Esta edición fue dedicada a dos insignes fundadores del Teatro Experimental de la Universidad de Chile, en 1941: Bélgica Castro, gran actriz en plena actividad; y el recién fallecido dramaturgo, novelista y arquitecto chileno-español José Ricardo Morales (1915-2016), que a fines del 2014 había cumplido 100 lúcidos años de edad.

El jurado eligió como ganadora a “El automóvil amarillo”, dentro de 70 obras presentadas.

Sin embargo, junto con ratificar la selección de un ganador o ganadora, los jueces decidieron dar a conocer también los títulos de las obras y el nombre de los autores y autoras de otras cinco propuestas que llegaron hasta el final con los máximos puntajes de evaluación, como una manera de reflejar cierta tendencia temática entre los textos postulantes, el valor de esas propuestas y por el predominio de las mujeres en el certamen.

Estos cinco preseleccionados son: “Hombre mito”, de Giselle Sparza Sepúlveda; “Milnovecientosnoventayuno”, de Daniela Capona; “Como cuidar un pato”, de Josefina González; “Cuéntame, la impunidad de la noche”, de Carlos Aragay Palma; y “La noche fuera del tiempo”, de Ximena Carrera.

La ganadora

Sally Campusano es Licenciada en Artes Escénicas, mención Actuación Teatral, Título de Actriz de la Universidad Mayor (2006); Diplomada en Teatro y Educación del Detuch (2006).

Co- fundadora de la compañía Niño Proletario donde trabajó los temas de la identidad, la memoria y el territorio, a través de diversas adaptaciones como “Hambre” (2006), “Temporal” (2008) y la creación dramatúrgica de “El olivo” (2009), exhibida en Chile, Colombia, Brasil, Bolivia, España, Italia y Suecia.

Ha participado en el Festival Iberoamericano de Cádiz en la conferencia “La escritura de las mujeres: un espacio emergente” (2011). También fue invitada a la Conferencia Internacional de Dramaturgas en Estocolmo (2012). Desde 2012 al 2015 se desempeñó como Coordinadora para América Latina de Women Playwrigts International Conference (WPIC), realizado en Sudáfrica en 2015.

En la actualidad reside en Francia, desde hace varios años, y su trabajo se centra en la puesta en escena de varios proyectos de dramaturgia y la educación teatral.

Fundamentos del Jurado

Agustín Letelier, presidente del Jurado, señaló: “La obra interpreta el clima de desesperanza e insatisfacción que se advierte en la mayoría de las obras nacionales del último tiempo, pero no lo mira desde el punto de vista político, sino humano, personal; atribuye la incertidumbre a la incapacidad de decidir, o de comprender”.

“Uno de sus personajes, la Mujer Sola, da una explicación a la violencia actual, lo que ella no comprende, lo destruye. Su estructura se aleja de las formas establecidas, es principalmente una serie de monólogos que expresan pensamiento en un clima de poética ambigüedad, lo que abre un amplio campo para la interpretación teatral”, agregó Letelier, quién es también crítico teatral de El Mercurio.

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La obra “El automóvil amarillo” de Sally Campusano ganó la tercera versión del Concurso de Dramaturgia, cuyo premio consistirá es montar esta obra como parte de la Temporada oficial 2017 del Teatro Nacional Chileno (TNCH).

Esta edición fue dedicada a dos insignes fundadores del Teatro Experimental de la Universidad de Chile, en 1941: Bélgica Castro, gran actriz en plena actividad; y el recién fallecido dramaturgo, novelista y arquitecto chileno-español José Ricardo Morales (1915-2016), que a fines del 2014 había cumplido 100 lúcidos años de edad.

El jurado eligió como ganadora a “El automóvil amarillo”, dentro de 70 obras presentadas.

Sin embargo, junto con ratificar la selección de un ganador o ganadora, los jueces decidieron dar a conocer también los títulos de las obras y el nombre de los autores y autoras de otras cinco propuestas que llegaron hasta el final con los máximos puntajes de evaluación, como una manera de reflejar cierta tendencia temática entre los textos postulantes, el valor de esas propuestas y por el predominio de las mujeres en el certamen.

Estos cinco preseleccionados son: “Hombre mito”, de Giselle Sparza Sepúlveda; “Milnovecientosnoventayuno”, de Daniela Capona; “Como cuidar un pato”, de Josefina González; “Cuéntame, la impunidad de la noche”, de Carlos Aragay Palma; y “La noche fuera del tiempo”, de Ximena Carrera.

La ganadora

Sally Campusano es Licenciada en Artes Escénicas, mención Actuación Teatral, Título de Actriz de la Universidad Mayor (2006); Diplomada en Teatro y Educación del Detuch (2006).

Co- fundadora de la compañía Niño Proletario donde trabajó los temas de la identidad, la memoria y el territorio, a través de diversas adaptaciones como “Hambre” (2006), “Temporal” (2008) y la creación dramatúrgica de “El olivo” (2009), exhibida en Chile, Colombia, Brasil, Bolivia, España, Italia y Suecia.

Ha participado en el Festival Iberoamericano de Cádiz en la conferencia “La escritura de las mujeres: un espacio emergente” (2011). También fue invitada a la Conferencia Internacional de Dramaturgas en Estocolmo (2012). Desde 2012 al 2015 se desempeñó como Coordinadora para América Latina de Women Playwrigts International Conference (WPIC), realizado en Sudáfrica en 2015.

En la actualidad reside en Francia, desde hace varios años, y su trabajo se centra en la puesta en escena de varios proyectos de dramaturgia y la educación teatral.

Fundamentos del Jurado

Agustín Letelier, presidente del Jurado, señaló: “La obra interpreta el clima de desesperanza e insatisfacción que se advierte en la mayoría de las obras nacionales del último tiempo, pero no lo mira desde el punto de vista político, sino humano, personal; atribuye la incertidumbre a la incapacidad de decidir, o de comprender”.

“Uno de sus personajes, la Mujer Sola, da una explicación a la violencia actual, lo que ella no comprende, lo destruye. Su estructura se aleja de las formas establecidas, es principalmente una serie de monólogos que expresan pensamiento en un clima de poética ambigüedad, lo que abre un amplio campo para la interpretación teatral”, agregó Letelier, quién es también crítico teatral de El Mercurio.