Como un método de clasificación, de forma permanente los grupos urbanos adoptan nombres para darse a conocer y así diferenciarse del resto.

Razón por la que últimamente han nacido una serie de especímenes urbanos, donde destacan los hispter, muppies, twee, yuccie, por nombrar a algunos.

Sin embargo, pese a esa oleada de nuevos jóvenes que viven en las grandes ciudades, hoy aparece un nuevo concepto llamado Fitsters, al cual podemos denominar como una rama de los hipster que utilizan el ejercicio y los hábitos saludables para mantenerse en forma.

Llevan un estilo de vida verde y sano, consumen alimentos completamente naturales, gran cantidad de smoothies, jugos detox e incluso se alimentan con productos de elaboración propia, dejando de lado las masas, azucares y grasas.

Gran parte de su vida gira en torno al gimnasio, las clases de yoga, pilates y la vida al aire libre, donde los entrenamientos intensivos son su mayor premisa.

Son ese grupo de personas que prefieren dormirse temprano un viernes por la noche para así aprovechar en su totalidad el fin de semana en una salida a caminar por el bosque, pasear por los cerros o disfrutar de un duro paseo en bicicleta.

Tales actividades deportivas las complementan con la toma de selfies durante sus entrenamientos para que así el resto vea en qué están y como disfrutan de sus pasatiempos. Asimismo, se juntan con personas que tengan su mismo pensamiento para así encontrar el equilibrio esperado entre la vida Zen y Fit que tanto anhelan.

Pero si hay una característica que los define por completo es que hacen de su estilo, un excelente método para desconectarse de la vida diaria y de las largas jornadas de trabajo. Pero pese a ello, son adictos a Instagram y utilizan esta red social para difundir su estado y sus logros “deportivos”.

Asimismo, esta app es la ventana que utilizan para mostrar a el gimnasio al que van, el jugo que beben, su receta favorita y la forma de preparación de ésta.

En ciudades como Londres (que fue donde partió este movimiento), Nueva York y Los Ángeles, cada vez existen más grupos de entrenamiento “selecto” donde acuden en masa y así lograr mantenerse en forma y guapos.

Escenario en que la conocida Kayla Itsines, se posiciona actualmente como la gurú de la vida saludable y con sus publicaciones arrasa en Instagram.

The Skinny Bitch Collective (SBC), con Russell Bateman a la cabeza, es una de las experiencias de las que no se para de hablar y la cual ofrece acondicionamiento físico a grupos reducidos. Y estos son sólo algunos ejemplos de algo que hoy ya comenzó a mover masas, sobre todo si pensamos que se acerca el verano y las ganas de estar en forma aumentan considerablemente.

Situación que los fitsters están poniendo de moda y es bienvenido por las marcas deportivas y de lujo, que al parecer sacan cuentas alegres con este nuevo fenómeno urbano que por lo menos en Chile ya va en aumento.

Si incluso Maurici Figuera, analista de tendencias de la empresa The Hunter, declaró al medio femenino Entre Mujeres que “aunque los fitsters definen una estética concreta y tienen unos códigos conductuales propios y bien definidos, es muy pronto para decir que son una cultura, sino que solo es un grupo adicto a la vida sana, un estilo fresco y contemporáneo”.

Para Figuera, el impacto de este espécimen urbano no es nuevo, ya que en los últimos años las dietas “verdes” y los estilos de vida enfocados en el Gym se han popularizado. “Tarde o temprano, acabará consolidándose”, apunta el experto.