El Senado uruguayo aprobó este martes un proyecto que legaliza el matrimonio entre homosexuales, duramente criticado por la Iglesia Católica en los últimos días, y que debe volver a ser validado en Diputados para completar su sanción.

El proyecto de ley fue aprobado en general con 23 votos sobre 31, tras siete horas de debate, con el respaldo de todos los legisladores del oficialista Frente Amplio (FA), y parte de los senadores de los opositores Partido Nacional y Partido Colorado.

El texto aprobado sostiene que “el matrimonio civil es la unión permanente, con arreglo a la ley, de dos personas de distinto o igual sexo” y modifica varias normas del Código Civil para igualar el matrimonio entre heterosexuales con el que contraigan personas del mismo sexo.

El texto ya fue aprobado en diciembre de 2012 en la Cámara de Diputados pero como el Senado le realizó modificaciones, deberá volver a la cámara baja para su ratificación.

Se prevé que los diputados lo votarán nuevamente la semana próxima.

El texto incluye la opción de elegir el orden en que se le darán los apellidos al niño, también en el caso de las parejas heterosexuales. Actualmente los hijos llevan primero el apellido del padre.

En los últimos seis años Uruguay legalizó la unión civil de homosexuales y la adopción de niños por parte de parejas del mismo sexo, además de habilitar el cambio de nombre y sexo y el ingreso de homosexuales a las Fuerzas Armadas.

En la región, el matrimonio homosexual está autorizado en Argentina desde 2010 y en Ciudad de México, desde 2009.