La declaración del papá de Diego Schmidt-Hebbel impresionó a todos los presentes en el tribunal donde se desarrolló el cuarto día de juicio en contra de María del Pilar Pérez y José Ruz Rodríguez, acusados del homicidio del joven y otras dos personas. Klaus Schmidt-Hebbel ingresó a la sala serio y vestido con un traje negro.

No llegó solo. Presenciaron su declaración unas cincuenta personas entre familiares, amigos y compañeros de su hijo Diego.

Por una hora y media describió emocionadamente la forma de ser del malogrado joven y la estrecha relación que tenía con su entorno.

Klaus Schmidt-Hebbel declaró que Diego era el puntal del círculo familiar y que siempre fue más amigo que hijo.

En más de una ocasión le fue inevitable derramar algunas lágrimas y en varias oportunidades no dudó en apuntar con el dedo índice a los presuntos asesinos de su hijo.

Contó que el día antes de su muerte había viajado a París por trabajo y que luego de enterarse de la tragedia regresó a Chile y se fue directamente a la formalización de José Ruz Rodríguez.

Klaus Schmidt-Hebbel recordó que a Ruz no lo conocía y que de La Quintrala sólo tenía antecedentes.

Durante la jornada también declaró Gabriel García, perito de la PDI, quien explicó que al momento de ser atacado, Diego Schmidt-Hebbel -por su estatura- tuvo que estar agachado o en el piso.

Sergio Sotelo, tanatólogo del Servicio Médico Legal, aclaró que fue el impacto de bala el que le ocasionó la muerte al joven y no la herida cortopunzante.

Para mañana, desde las nueve, se espera que suba al estrado a prestar su declaración Greta Niehaus, la madre de Diego.