Tras 14 meses de proceso judicial, un matrimonio de Hualaihué fue absuelto de tráfico de marihuana, marcándose un precedente en Chile respecto a la penalización al cultivo de esta droga.

El caso se remonta a la madrugada del 6 de marzo del año pasado, cuando el ciudadano de Luxemburgo, Daniel Back, y su esposa, la chilena Waleska Paredes, sufrieron el robo frustrado de dos plantas de marihuana que cultivaban en un invernadero en el patio de su casa, ubicada en la isla Llancahué, comuna de Hualaihué.

El OS-7 supo de este hecho, iniciando la fiscalía local un proceso en contra de la pareja por tráfico, tras incautarse cerca de 2 kilos de cannabis sativa.

Luego de un año y dos meses de proceso judicial, que incluyó 2 meses de prisión preventiva para el matrimonio, el Tribunal Oral en lo Penal de Puerto Montt absolvió a la pareja en fallo unánime, dándole la razón a la defensa que finalmente logró acreditar que se vulneraron los derechos de sus defendidos que fueron víctimas de un robo frustrado con violencia y no protagonistas de un tráfico.

Tras el fallo, Daniel Back planteó que el consumo de marihuana en espacios privados no debiera ser penalizado.

Por su parte, Waleska Paredes, su esposa, defendió la opción del autocultivo, sobre todo cuando se realiza con fines terapéuticos como quedó acreditado en este caso, por lo que espera que el fallo sirva para que se despenalice el cultivo de marihuana que, de paso, ayudaría a frenar el tráfico de la cannabis.

Para el abogado defensor, Jaime Millán, el fallo es histórico en Chile y marca un precedente, sobre todo para el actuar de las policías que ahora deberán justificar plenamente su intromisión en la intimidad de los hogares.

La lectura de la sentencia de este caso fue programada para el miércoles en el mismo tribunal, tras lo cual el matrimonio junto a su abogado estudiarán el inicio de acciones legales en búsqueda de indemnizaciones.

Además el defensor emplazó al fiscal regional de Los Lagos, Marcos Emilfork, para que explique el actuar de los profesionales de la Fiscalía Local de Hualaihué, que nunca se pusieron del lado de las víctimas de un robo con violencia.