El jefe de gobierno italiano Silvio Berlusconi aseguró este martes que las relaciones con Brasil “no cambiarán” pese a las tensiones consecutivas al rechazo de la extradición de ex militante de extrema izquierda Cesare Battisti, condenado en Italia a cadena perpetua por su participación en cuatro asesinatos.

“Este caso no afecta las buenas relaciones que tenemos con Brasil, se trata de un caso de justicia por lo que nuestras relaciones con ese país no cambiarán por causa de esa situación”, declaró Berlusconi al término de una reunión en Milán (norte) con Alberto Torregiani, hijo del joyero asesinado en 1979 por un comando del grupo de ultraizquierda Proletarios Armados por el Comunismo (PAC), del que Battisti fue miembro.

“Me he hecho a la idea de que Battisti cubrió con ideología política su realidad de verdadero criminal”, concluyó.

Manifestaciones en varias ciudades de Italia, entre ellas Roma y Milán, fueron convocadas este martes para protestar contra la decisión de Brasil de negar la extradición al ex militante de extrema izquierda.

El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, decidió el viernes pasado, en su último día de gobierno, de no extraditar a Battisti, lo que generó la airada respuesta de diversas autoridades y representantes políticos italianos.

Se trata del primer conflicto diplomático que enfrenta la nueva presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.