Comenzar una relación no es tan difícil como mantenerla en el tiempo, pues para que sea exitosa requiere de ciertos requisitos que algunos expertos ya han podido identificar.

Los destacados doctores en psicología John Gottman y Julie Schwartz -expertos en relaciones de pareja y fundadores del Instituto Gottman, dedicado a la investigación de las relaciones humanas- señalaron en una columna en el portal especializado Psychology Today que tras una década de análisis descubrieron un conjunto de variables que pueden predecir si un matrimonio tendrá éxito o fracasará.

Tras revisar más de 300 entrevistas a parejas y recopilar datos de otros estudios, descubrieron que las parejas que tienen más probabilidades de tener matrimonios felices muestran las siguientes cualidades y características cuando hablan de su relación:

1. Cariño, afecto y admiración

Los expertos aseguran que las parejas con mejor pronóstico son aquellas que expresan su afecto por el otro, son cálidas, cariñosas y se ríen mucho juntas.

Asimismo, destacan los buenos tiempos vividos y constantemente felicitan a su pareja.

Los expertos se dieron cuenta que las parejas felices solían enfatizar sus buenos momentos y minimizaban los malos, mientras que aquellas que luego terminaban en separación se enfocaban más en lo negativo y le restaban importancia a lo positivo cuando hablaban. Asimismo, quienes llevaban un romance exitoso enfatizaron los rasgos positivos de su pareja y minimizaron las características más molestas.

2. Dicen “nosotros” por sobre “yo”

Las parejas que enfatizan su capacidad para comunicarse bien entre sí y su unidad suelen ser más exitosas.

“Usan palabras como ‘nosotros’ o ‘nuestro’ en lugar de ‘yo’ o ‘mío’. No se describen a sí mismos de manera separada”, aseguran.

3. Recuerdan de manera clara y enérgica sus buenos momentos

De acuerdo a Gottman y Schwartz, la pareja exitosa describe los recuerdos de su pasado en conjunto de manera vívida y clara, y no vagamente o de manera general sin detalles. Son positivos y enérgicos al hablar sobre su relación, en contraste con quienes lo hacen sin energía ni entusiasmo.

“Expresan información íntima sobre ellos mismos, en lugar de permanecer impersonales y contenidos”, enfatizan.

4. Se enorgullecen de haber pasado momentos difíciles juntos

“En una relación, las personas construyen una vida entera juntas, comparten valores, propósitos y significados”, dicen los especialistas.

Quienes tienen un buen pronóstico suelen expresar orgullo por haber sobrevivido a los tiempos difíciles, en lugar de expresar desesperanza. “Enfatizan su compromiso con la relación en lugar de cuestionar si realmente deberían estar con su compañero. Están orgullosos de su relación en lugar de avergonzarse de ella. Hablan de sus valores compartidos, metas y filosofía de vida”, indican.

“Han creado intencionalmente un sentido de significado y propósito compartido, incluso en la forma en que se mueven a través del tiempo juntos. Y crean tradiciones intencionales en su relación para conectarse emocionalmente. Llamamos a estos ‘rituales de conexión’. Las fechas son un ejemplo de rituales de conexión”, expresan.

La importancia de tener una visión positiva

Gottman y Schwartz dicen que si una pareja expresa negatividad al hablar de la relación, ya sea con palabras, expresiones faciales o lenguaje corporal, es señal de que casi inevitablemente fracasará.

“Si la pareja expresa su decepción en la relación, se siente desilusionada, como si el matrimonio no ha sido lo que pensaron que sería, o se sienten deprimidos, desesperados y amargados por su relación, el divorcio es muy probable”, comenta.

Los expertos recalcan que los eventos negativos y los incidentes lamentables son inevitables en todas las relaciones, por lo tanto influye mucho la mirada que las personas le dan a las situaciones.

Pexels (CCO)
Pexels (CCO)

Todo se reduce a que si en general percibes las situaciones de manera negativa la relación rápidamente se irá erosionando, aseguran. “Cada matrimonio y relación exitosa tiene, en su base, una amistad profunda y cercana: personas que realmente se conocen y que, en el fondo, están del mismo lado y forman parte del mismo equipo. Las palabras que elijas importan. Tu tono de voz importa. Incluso tus expresiones faciales son importantes”, enfatizan.

“Por supuesto, todos nos equivocamos a veces. Nos comunicamos mal, y cuando lo hacemos necesitamos hacer reparaciones. No esperar ningún problema de comunicación en una relación es como esperar meter un gol cada vez que pateas una pelota. Las relaciones felices no son relaciones donde no hay peleas. Son relaciones en las que se realizan reparaciones después de que suceden incidentes lamentables, y donde una pareja se conecta día a día. Las parejas felices no son tan diferentes de las parejas infelices; simplemente pueden hacer que las reparaciones de su relación sean más fáciles y rápidas para que puedan volver a la alegría de estar juntos”, afirman.

Al final, dicen Gottman y Schwartz, una gran parte del éxito o el fracaso de una relación depende de las conversaciones que se tengan entre sí, pues éstas unen a las personas y las vuelven a enamorar.

Jasmine Wallace Carter  | Pexels (CCO)
Jasmine Wallace Carter | Pexels (CCO)

Otras señales

Pero Gottman y Schwartz no son los únicos expertos que han recopilado información al respecto. A continuación te dejamos una selección de otros indicadores de que una relación es sana y con buen pronóstico, de acuerdo a la psiquiatra y terapeuta Abigail Brenner.

Tú y tu pareja están en sintonía en términos de valores básicos y metas en la vida. “Ambos saben lo que quieren de la vida, sus objetivos comunes, lo que desea cada uno lograr en la vida, y están firmemente comprometidos con el logro de esto juntos”, señaló Abigail.

Algo similar opina la escritora, oradora y columnista de Bable.com, Chaunie Brusie, quien planteó en una de sus columnas que “establecer metas juntos, haciendo planes para el tipo de vida que quieres vivir con tu pareja, y comprobar en el camino, ayuda a mantenerse conectados mientras sueñan”.

Hay un fuerte sentido de confianza entre ustedes. Están abiertos a discutir todo: lo bueno, lo malo y lo feo. No hay una agenda oculta ni secretos de su pasado.

Si tienes miedo de expresar lo que sientes, piensas, sueñas, anhelas o temes revelar quién realmente eres es que algo no anda bien en la relación.

Mantienes tu propia identidad dentro de la relación, y lo mismo ocurre con tu pareja. “Esto es tan vital. Tu relación puede ser una gran parte de lo que identifica quién eres, pero aún así, sigues siendo lo que eres como individuo más allá de tus diferentes roles en la vida”, comenta la especialista.

Lo ideal, para el terapeuta es comprometerse emocionalmente con la pareja, pero viéndola como un individuo y no como “tu otra mitad” porque no sólo perderás tu identidad, sino que también el interés. “Deben complementarse no unirse”, aconseja.

Pasan tiempo de calidad juntos. Hacen cosas juntos, cosas importantes para los dos, no sólo las que interesan a ti o él individualmente.

El psiquiatra Mark Gulston, señala que cuando la pasión baja sus niveles, es común que las parejas se den cuenta que tienen pocos intereses en común. Por ello, no hay que restarle importancia a las actividades que pueden desarrollar y disfrutar en conjunto, dice el experto. “Si los intereses comunes no están presentes, las parejas felices los desarrollan”, señala, recomendando también tener actividades por separado, para que la relación no se vuelva demasiado dependiente.

Pexels (CCO)
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Se animan el uno al otro a crecer y cambiar. “En otras palabras, se inspiran entre sí para ser una mejor persona”, señala Abigail.

Michael Sama, coach de relaciones, dice que “dos personas que se quieren y que se preocupan por la otra persona nunca intentarían desilusionar a su pareja o retenerla. Ellos se animan y se apoyan cuando tratan de perseguir sus objetivos y sus sueños”, explica James.

De acuerdo a Sama, cuando reprimes a tu pareja, la relación se resiente a largo plazo. “Paradójicamente, dar mayor libertad a tu pareja a menudo supone un acercamiento por su parte”, asegura.

Tú y tu pareja se sienten seguros al comunicar sus necesidades personales y deseos. Discuten temas de interés para ustedes como pareja y para cada uno de ustedes individualmente. “Escuchar cuidadosamente con toda la atención es esencial para la verdadera comprensión”, señala la psiquiatra.

“No todo en la relación va a ser maravilloso, pero los retos a los que tengan que enfrentarse juntos los harán más fuertes, como individuos y como pareja. No se puede solucionar ningún problema si no se le hace frente, y las personas que se preocupan por su pareja serán lo suficientemente maduras para tener discusiones de adultos y llegar a una conclusión”, explica Sama.

Respetan las opiniones del otro, incluso si no están de acuerdo. “Eres capaz de convertir sus diferencias en un compromiso justo”, dice Abigail.

En el fondo, eres capaz de aceptar que tu pareja puede pensar diferente a ti y eso no lo hace una peor persona, sino que simplemente una diferente.

Comparten expectativas realistas de la relación. Recuerda que estás tratando con otro individuo extraordinariamente complejo, además de ti mismo. Hay suficiente que trabajar como para perseguir ideales poco realistas.

Tal como señaló anteriormente a BioBioChile, la magíster en psicología clínica, Camila Aguayo, una de las mayores dificultades “es dejar de ver lo real de la relación y lo real que cada miembro de la relación puede aportar a esta unión de a dos”, añadiendo que cuando las expectativas y proyecciones infantiles son desplegadas, “las personas confunden la relación con los intercambios que se van ofreciendo sin ver más allá el sentido de estar juntos”.

Paloma Avilés | Pexels (CCO)
Paloma Avilés | Pexels (CCO)

Cada uno de ustedes aporta su parte a la relación. Cada miembro aporta sus mejores fortalezas y habilidades en beneficio del “equipo”.

También se trata de no dar a la pareja por sentada. Es fácil caer en esto cuando tienes una relación larga, pero recuerda siempre que las relaciones se construyen de a dos y que el amor se muere cuando no lo alimentas. Da las gracias por las contribuciones de tu pareja y constantemente pregúntate qué puedes hacer tú para contribuir.

Tú y tu pareja respetan los lazos de amistad y familiares de cada uno. “Si bien es importante reservar un tiempo para la familia y los amigos, también es importante mantener límites saludables entre tú y tu pareja como una unidad aparte de otras relaciones cercanas”, comenta Abigail.