Situación: viajar a un país sin saber el idioma es complicado; irse a vivir allí, ya es otro tema. Eso fue lo que vivió la tiktoker chilena Catalina Aguilar de 23 años. Bromea a diario con hechos que para ella fueron difíciles y que, incluso, la hicieron llorar. Pero demuestra que es necesario creerse el cuento, como se dice. Lanzarse a hablar y equivocarse si es necesario.
Llegó a vivir en 2012 a Weybridge, en Reino Unido, cuando tenía 15 recién complidos. “Nos fuimos, por trabajo de mis papás. Sabía las reglas básicas del idioma, como el past simple y el present simple y traté de aprendérmelas bien, para llegar allá tipo ‘ya, tú puedes’. Llegué al colegio y me hablaban, me hablaban y no entendía nada. Era como chino”, recordó en conversación con BioBioChile.
“Yo decía yes, yes, todo el rato (…) Fue difícil. Siempre cuento que todos se ríen de mis tiktoks pero las primeras semanas yo iba al baño a llorar. Tuve la suerte de tener una amiga colombiana que hablaba inglés y que me ayudó al principio. Me frustraba mucho, la sufrí harto”, contó.
Está de vuelta en Chile por estudios. La Universidad en Inglaterra es aún más cara que en Chile, sobre todo para un extranjero, así que decidió devolverse para surgir. Es nadadora y, aparte, está cursando fonoaudiología en la Pontificia Universidad Católica de Chile, en la capital.
El “alter-ego”
Descargó la aplicación TikTok en enero. Fue antes de que la pandemia de covid-19 llegara a territorio nacional y nos encerrara a todos. “Con esto de la cuarentena (…) me metí a la aplicación y empecé haciendo videos sólo para bromear y no sé, salió esto”, dijo.
Su particularidad es que en los registros, que ya acumulan más de 15 millones de ‘me gusta’, interpreta a dos personajes: una británica con su acento inglés tan característico y una chilena que intenta entender, aunque lo hace a medias y lo demuestra con un tono de voz bastante divertido.
“Yo soy así. Cuando estoy con mis amigas siempre hago voces, caras. Soy bien extrovertida. No es algo que haya inventado en TikTok. Soy así de loca, bien ridícula“, broméo. (Abajo un ejemplo)
@catalinaia Mi caja registradora le da el toque ##fyp ##parati ##tendencia ##viral
“Me dicen que es un alter-ego pero yo no la defino. No tiene nombre. Es mi amiga, mi gemela”, comentó. “No sé cómo se me ocurrió (…) vi que había varias tendencias similares y dije que podría hacer uno de mi experiencia en Inglaterra. Hice el primero y se hizo viral. Qué loco. Noté que esos videos de mi ‘amiga’ y yo entretenían y los seguí haciendo“, agregó.
Así en casi todos sus registros, en los que da cuenta lo difícil que fue comunicarse. Más aún cuando en Chile, algunas frases que se enseñan en las aulas, no se corresponden con la realidad lingüística. ¿Quién no se acuerda del May I go to the bathroom, please? en las clases de inglés, pidiendo permiso para ir al baño? Pues bien, en Inglaterra el bathroom es donde está la ducha. Todo un sin sentido.
@catalinaia The helper ##fyp ##parati ##tendencia ##viral
Más de 800 mil seguidores
Ahora tiene más de 860 mil seguidores en la red social. En Instagram, en tanto, otros casi 30 mil. Al respecto, manifestó que “no me lo esperaba. Me lo tomo muy tranquila, al principio, los comentarios negativos me llegaban mucho. Como era un mundo nuevo, me decía ‘pucha, qué lata‘, pero después aprendí que no le podía caer bien a todo el mundo”.
“No me creo ni famosa, ni una figura. Soy una estudiante que hace tiktoks y lo pasamos bien con la gente (…) He visto muchos tiktokers a los que se les olvida de dónde vienen, se les sube el ego, y no me gusta eso”, agregó, y aunque no se refirió a una persona en específico, cabe recordar la polémica de Kunno, uno de los más famosos de Latinoamérica. Él comenzó a cobrar unos 42 mil pesos chilenos por saludo.
“A mis seguidores les entrego que uno puede aprender un idioma sin saber nada. No tienes por qué ir a un país sabiendo hablar la lengua. Cada persona aprende de forma distinta, se pueden demorar tres o seis meses, incluso un año. Lo importante es que se suelten y que no les de miedo equivocarse, porque así se aprende”, explicó.
“Yo, por pava y por vergüenza, me quedé callada (los primeros meses en Inglaterra). Pero nunca se rieron de mí, fueron muy respetuosos. Los incentivo a aprender otro idioma de una forma entretenida”, agregó.
Para ella el mensaje es uno: “denle, ustedes pueden aprender un idioma sin saber nada y a la edad que sea”. “Mientras la pasen bien conmigo, genial. Voy a seguir haciendo tiktoks mientras la pase bien. La aplicación me alegró harto la pandemia, porque en un minuto de la cuarentena estaba muy mal, cosas que pasan, y el cariño de la gente es súper rico”, cerró.
@catalinaia Hay que dar lo mejor de uno siempre 😂 ##fyp ##parati ##tendencia ##viral
