Luego de que el Tribunal Supremo de la India prohibiera la venta de alcohol a menos de 500 metros de las carreteras nacionales y estatales, uno de los locales afectados con la medida se las ingenió para cumplir con la ley sin tener que trasladarse.
Se trata del bar Aiswarya, cuyos dueños se vieron en la obligación de hacer algo luego de que la justicia de aquel país buscara la fórmula para disminuir las cifras de conductores ebrios.
Sin embargo, y tal como recoge la edición online del periódico norteamericano Boston Globe, los propietarios del club no estaban dispuestos a perder su clientela. El problema es que les era imposible trasladarse a otro lugar, por lo que aprovecharon un vacío legal para poder seguir funcionando.
Poco antes de la entrada en vigencia de la nueva ley, los propietarios del establecimiento, que está ubicado a unos 150 metros de la autopista 17 en Kerala, comenzaron a construir un pequeño laberinto de hormigón, desde las cercanías de la autopista hasta la entrada del bar.
De esta manera lograron aumentar tres veces la distancia original, por lo que ahora el bar, técnicamente, está a 520 metros de la carretera.
Esto fue posible debido a que la normativa no específicaba si los metros debían contarse en línea recta, por lo que podrán seguir funcionando.
“Una caminata antes y después de unos tragos podría incluso ser beneficioso para la salud”, comentó al diario local India Times uno de los vendedores que trabaja en las cercanías del lugar.