El locutor radial mencionó en un tuit que “no hay una conmemoración posible mientras no digan dónde están los cuerpos de los detenidos desaparecidos”, afirmó.

A 66 días para que se conmemoren 50 años del golpe de Estado, el locutor radial Roberto Artiagoitía, alias Rumpy, entregó una sentida reflexión en torno a la fecha.

A través de Twitter, el conductor entregó su parecer sobre los hechos ocurridos el 11 de septiembre de 1973.

En la oportunidad, el hombre conocido como El Rumpy, advirtió que “la mesa común no necesita un relato pomposo y unitario, ese nunca más parte con los milicos diciendo donde están los cuerpos de l@s detenid@s desaparecid@s.. La cobardía y los pactos de silencio de los militares son una vergüenza para nuestro futuro”.

Así, el creador del Chacotero Sentimental, profundizó en su crítica sobre lo que debería ocurrir de aquí en adelante.

“Para la conmemoración de los 50 años, las víctimas no esperan palabras ni reflexiones de un escritor, se necesitan hechos, gestos de grandeza de los militares. ¡Entreguen los cuerpos de las víctimas!”, escribió el locutor de Radio Corazón.

“No hay una conmemoración en común posible mientras no digan dónde están los cuerpos de los detenidos desaparecidos. No hay relato que sustente esa junta. Ni en 50 años, nunca”, exclamó en el tuit.

Sin embargo, el comunicador terminó su discurso con un chilenismo. “Si esa era la idea, entúbatela”, finalizó.

Los dichos del Rumpy sobre el golpe de Estado

Por otra parte, después de sus dichos, en conversación con Radio ADN, el rostro sostuvo que estaba cansado de “eslóganes” sobre este sensible tema.

“Creo que en un mundo lleno de eslóganes, de frasecitas, de marqueteo… En el hoy, en cosas con víctimas, con desaparecidos, lo que hace falta son gestos. No es una frasecita bonita, ni una mesita decorada. ¡Son gestos! Y los gestos lo tienen que tener los milicos, que digan dónde están”, expresó.

A su vez, reafirmó que la gran deuda pendiente es con los familiares de los detenidos desaparecidos durante la dictadura cívico militar. “Porque eso es reconocer una política de exterminio avalada por el Estado. Es mucho más. Imagínate las víctimas, ¿cómo no van a tener el derecho a tener un lugar donde estén sus deudos? Es que, ¡no puede ser! No es posible si no están. ¡Que digan dónde están!”, concluyó.