Un confuso incidente ocurrió el pasado 4 de julio en la ciudad de Los Angeles (EEUU), cuando una mujer de 30 años dio una golpiza a un adulto mayor de 91 años en plena calle. En ese momento, el hombre quedó con la mandíbula rota, dos costillas fracturadas y su cara llena de sangre. En el juicio respectivo, la protagonista del hecho indicó que el ciudadano había querido “tocar a su hija”.
Según detalla el diario inglés Daily Mail, la madre fue identificada como Laquisha Jones y, por ahora, enfrenta un juicio en el que arriesga una condena que podría llegar a los 15 años de presidio, si no se comprueba que el hombre quiso atacar a su hija de 4 años.
La víctima del hecho fue identificada como Rodolfo Rodríguez, de origen mexicano, quien es ciudadano estadounidense aunque no habla el idioma inglés.
El citado medio describe que ambos se encontraron aquel día, a las 8:00 de la tarde, en un suburbio de Los Angeles. Fue allí cuando ella botó de un golpe al anciano y luego lo atacó con un ladrillo.
Tras unos minutos llegaron dos hombres a tratar de separar la pelea. Según testigos, la mujer lanzó el ladrillo lejos al ver que un vecino estaba grabando la agresión.
Luego de ser separados, Jones dijo que el hombre “trató de tocar a mi hija”, lo que fue negado por Rodríguez en el acto.
No obstante, la madre fue detenida por la policía dos días después, debido a que la familia del hombre interpuso una denuncia por racismo, contra ella.
En la versión de Rodolfo, su atacante le habría dicho: “Vuélvete a tu país, ¿Qué haces acá?”. Segundos después comenzó a golpearlo.
Cabe señalar que el veterano fue ingresado a un recinto asistencial, donde expresaron que llegó con la mandíbula quebrada, pómulos rotos, costillas partidas y contusiones en la cara, la espalda y el abdomen.
Por su parte, Laquisha Jones conocerá su sentencia el próximo 28 de febrero. Por el momento, ella se declaró inocente de los cargos que se le imputan (incitación al odio).
