No basta con apagar los dispositivos y electrodomésticos, estos siguen consumiendo cierta cantidad de energía al permanecer enchufados.

Desenchufar ciertos electrodomésticos cuando salimos de casa puede suponer un gran alivio para las cuentas del hogar. No solo eso, también es más seguro y reduce el riesgo de cortocircuitos. Incluso, es una buena práctica en el día a día para disminuir el consumo de luz, así se evita el famoso “consumo fantasma”.

Según la Agencia Internacional de Energía, el consumo de energía que se genera en los hogares producto de diferentes electrodomésticos que continúan utilizando energía bajo el “consumo fantasma”, es entre un 5% y un 10% diario.

Qué es el consumo fantasma

El consumo vampiro o consumo fantasma se refiere al gasto de energía invisible que ocurre cuando conectamos dispositivos a la red eléctrica sin usarlos o incluso cuando están apagados. Así lo describe Sebastián Lira, PhD en Ciencias de la Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

“Numerosos dispositivos continúan consumiendo energía mientras están apagados o en modo de espera. Esto incluye notebooks, equipos de sonido, routers inalámbricos, televisores, impresoras, cargadores de celular, cables de notebook, hervidores en la cocina y consolas de videojuegos. La lista parece interminable”, aseguró.

Qué dispositivos conviene mantener desenchufados

A continuación puedes revisar un listado completo sobre los electrodomésticos y dispositivos que deberían desconectarse de la corriente habitualmente, tanto en el día a día como si el hogar estará deshabitado durante una temporada.

1. Cargadores y alargadores. Estos no solo aplican cuando uno sale de vacaciones, sino que en general no es recomendable mantener los cargadores enchufados cuando no se están usando. Lo mismo pasa con los alargadores. “Tenemos la costumbre de tenerlos conectados con muchos aparatos electrónicos, pero lo peor, nunca los desenchufamos. Si no estás usando alguno de los aparatos que tienes conectados a ella, sácalo”, señalan desde Conadecus.

2. Ventiladores y aires acondicionados. Se trata probablemente de los equipos domésticos más utilizados durante la temporada de verano. Por lo mismo, pueden pasar desapercibidos cuando se dejan enchufados cuando están en desuso.

Sin embargo, es importante tener cuidado. Estos pueden significar un 85% de aumento en el uso de la electricidad y, aunque en menor medida, también la consumen estando apagados. Por eso la recomendación es desenchufarlos si no se están ocupando.

3. Televisión. No es suficiente con apagarla, es necesario desenchufar este dispositivo para que el consumo sea cero. Así mismo ocurre, por ejemplo, con los computadores, videojuegos o routers. Estos últimos, conviene desenchufarlos solo cuando no estaremos en casa por un tiempo prolongado, ya que de lo contrario se entorpecería el acceso a internet.

4. Electrodomésticos de la cocina. Esto incluye microondas, lavavajillas, lavadora, cafetera, tostadora, y cualquier otro electrodoméstico que no requiera una fuente constante de energía para funcionar, como es el caso del refrigerador.

Sobre el último, este no debe desconectarse nunca. La razón es que, además de que los alimentos pueden perder su cadena de frío y descomponerse, el mismo refrigerador puede terminar consumiendo el doble una vez que se enchufe de nuevo. Además, puede perjudicar su sistema interno de lubricación.