En Chile, el novedoso procedimiento ambulatorio para lograr un peso saludable, llamado balón intragástrico Elipse, que no requiere de cirugía ni anestesia, ha tenido positivos resultados en pacientes con sobrepeso.

Según un estudio de Ipsos de este año, durante la pandemia los chilenos subieron 7 kilos en promedio, producto del mayor consumo de comida chatarra, la elaboración de comidas altamente calóricas y el pedido permanente de comidas a través de aplicaciones de delivery, a raíz de las extensas cuarentenas.

Ante este escenario, el balón intragástrico se presenta como una solución rápida y no invasiva para bajar de peso, y ha comenzado a expandir su uso en nuestro país, según indica la Clínica Andes Salud Concepción.

El centro médico explica que la instalación del balón intragástrico Elipse es un procedimiento seguro y se presenta como una alternativa conveniente, ya que no requiere hospitalización.

Este proceso, que demora alrededor de 20 minutos, consiste en instalar un balón intragástrico ingerible, tipo cápsula, conectado a una sonda que sirve de guía. Al soplar el balón con suero fisiológico, se verifica su posición mediante una radiografía, y una vez que esté correctamente posicionado, se desconecta de la válvula.

Este balón permanecerá dentro del estómago del paciente durante 4 a 6 meses, produciendo una sensación de saciedad, hasta que se degrade y expulse, sin requerir un procedimiento adicional.

Esta técnica no invasiva la debe realizar un equipo multidisciplinario, es decir, no es sólo ingerir el balón, sino que es un tratamiento completo que incluye nutricionista, nutriólogo, psicólogo y kinesiólogo.

En ese sentido, el doctor James Hamilton, cirujano digestivo, bariátrico y especialista en robótica de la Clínica Andes Salud Concepción, explica que “este balón intragástrico es el puntapié inicial para aquellos pacientes que han intentado bajar ese sobrepeso con dieta, medicamentos y con algún grado de ejercicios y que no han obtenido los resultados esperados, debido a razones multifactoriales”.

“De esta forma, se puede lograr el compromiso del paciente y avanzar en la solución de una enfermedad junto a un equipo multidisciplinario que realizará el acompañamiento”, agrega.

Según explica, el Dr. James Hamilton se ha evidenciado una pérdida de entre 10 a 15 kilos en 16 semanas. El paciente es acompañado por 12 meses y la mayoría de las personas reanuda su vida normal uno o dos días después de recibir el control por el especialista.

Los candidatos para este procedimiento son pacientes con índice de masa corporal (IMC) cercano o superior a 30, y que han fallado en lograr o mantener un peso adecuado y saludable a través de programas supervisados de alimentación, ejercicios y cambio de hábitos. En el Gran Concepción, este tratamiento está disponible en la Clínica Andes Salud Concepción.

Clínica Andes Salud Concepción