Durante el invierno el aumento de patologías respiratorias se hacen presentes, afectando principalmente a niños, adultos mayores y embarazadas. Sin embargo, con el coronavirus las vacunas como para la influenza retrasó su proceso de inoculación, sumando además el cierre de varias urgencias respiratorias en el país.

Por esta razón, los especialistas enfatizan en la importancia de los cuidados a los grupos de riesgo, debido a que las condiciones climáticas, el encierro y la falta de ventilación pueden ser propicios para la transmisión de los virus.

La doctora Gema Pérez, pediatra broncopulmonar Clínica Vespucio, explicó que “habitualmente estamos expuestos a virus influenza, pero por otro lado tenemos los otros virus respiratorios infantiles como el virus sincitial, del cual ya hemos visto casos en los hospitales pediátricos, además del adenovirus y rinovirus que están robándose la película tanto en pediatría como en adultos en los pacientes crónicos respiratorios”.

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La profesional enfatiza además que estos pacientes crónicos incluyen enfermedades como asma, bronquiolitis, fibrosis pulmonar, personas con secuelas de cuadros respiratorios antiguos y fibrosis quística. “Los pacientes displásicos pulmonares, que son los prematuros extremos, también forman parte de este grupo de riesgo y por supuesto toda aquella persona que es oxígeno dependiente”.

El paciente fumador puede adquirir todos estos virus respiratorios con mayor facilidad, al igual que el coronavirus, y tener más secuelas, complicaciones o cuadros más graves asociados a todos estos virus”, agregó la pediatra.

Virus respiratorios en invierno

El coronavirus no es el único virus que está afectando a pacientes por estos días. La influenza continúa siendo una preocupación para las autoridades de salud, por lo que el proceso de inoculación contra esta patología también es importante, sobre todo para aquellos que están en los grupos de riesgo.

En el caso de nuestro país y de acuerdo a lo estipulado por el Ministerio de Salud (Minsal), los grupos objetivos comprenden personal de salud, personas mayores de 65 años y enfermos crónicos entre los 11 y 65 años.

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Esto, debido a que “las complicaciones de esta enfermedad puede llevar a la hospitalización e incluso provocar la muerte, ejemplos de complicaciones graves son la neumonía y la bronquitis severa. Así mismo la influenza también puede ser causa de complicaciones de ciertas enfermedades como la diabetes, el asma y las enfermedades cardíacas o pulmonares”, según señala el sitio del Minsal.

El Centro de Prevención y Control de Enfermedades indica que “la influenza se transmiten principalmente a través de las pequeñas gotas que se producen cuando las personas con influenza tosen, estornudan o hablan. Estas gotitas pueden caer en la boca o en la nariz de las personas que se encuentran cerca. Siendo algo poco frecuente, una persona puede llegar a contraer la influenza si toca una superficie o un objeto contaminado con el virus de la influenza y luego se toca la boca, la nariz o los ojos”.

Sin embargo, existen otras complicaciones respiratorias por las cuales los especialistas llaman a cuidarse. En un comunicado de Clínica Dávila, se especifica que tanto la faringitis, bronquitis y neumonía, puede ser igual de riesgosos.

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La faringitis es causada por hinchazón de la parte posterior de la garganta (faringe), entre las amígdalas y la laringe. La mayoría de los dolores de garganta son causados por resfriados, gripe, virus coxsackie o mononucleosis. Según se explica desde el sitio MedlinePlus, “la mayoría de los casos de faringitis ocurre durante los meses más fríos. La enfermedad con frecuencia se propaga entre los miembros de la familia y contactos cercanos”.

En cuanto a la bronquitis, esta es una inflamación del revestimiento de los bronquios que llevan el aire hacia adentro y fuera de los pulmones. Las personas que la padecen suelen toser mucosidad espesa y en algunos casos decolorada, y puede presentarse de manera aguda o crónica.

“La bronquitis aguda es muy frecuente y, a menudo, se produce a partir de un resfrío u otra infección respiratoria. La bronquitis crónica, enfermedad más grave, es una irritación o inflamación continua del revestimiento de los bronquios, en general, por fumar”, señalan desde Clínica Mayo.

La neumonía es una infección que inflama los sacos aéreos de uno o ambos pulmones, los que se pueden llenar de líquido o pus (material purulento), provocando tos con flema, fiebre, escalofríos y dificultad para respirar. “Puede variar en gravedad desde suave a potencialmente mortal. Es más grave en bebés y niños pequeños, personas mayores a 65 años, y personas con problemas de salud o sistemas inmunitarios debilitados”, especifican desde Clínica Mayo.

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Sobre cómo prevenir estas enfermedades, en el caso de la influenza la vacuna que ayuda a disminuir los graves daños que puede generar esta enfermedad, mientras que para las otras complicaciones respiratorias incluyen medidas como mantenerse alejado de las personas que están enfermas, cubrirse la boca y nariz al toser y estornudar y lavarse las manos con frecuencia, lo que ayudará a disminuir la propagación de microbios que causan enfermedades respiratorias en nariz, garganta y pulmones.

Además, la ventilación de los hogares y evitar circular por lugares cerrados con muchas personas son importantes para la prevención de enfermedades respiratorios, aunque también evitar la exposición al humo, especialmente del cigarro, que puede ser factor de riesgo para los pacientes que tengan estas patologías.