Científicos de Rice University y Baylor College of Medicine, Texas, Estados Unidos, están probando una pequeña cápsula producida con algas, rellena de células madres, como tratamiento para pacientes que han sufrido un ataque cardíaco.

Se trata de un pequeño aparato, del grosor de un grano de arroz (1,5 milímetros de diámetro), que es inyectado en el corazón a través de una incisión en el costado del pecho.

Con sus cerca de 30 mil células madre, se espera que ésta ayude en la sanación del músculo cardíaco que quedó afectado tras un ataque por la obstrucción de circulación de sangre. Así, además, se podría curar la insuficiencia cardíaca que produce que el músculo no pueda bombear suficiente sangre para el organismo.

Esta última es tratada a través de medicamentos y cambios en el estilo de vida, aunque éstos no pueden reparar el daño producido en el corazón.

¿Por qué son importantes las algas?

El portal británico Daily Mail recoge que han existido otros intentos por inyectar células madre en el corazón, aunque el sistema inmune no logró identificarlas y las destruyó, tras considerarlas material extraño.

Otro problema es que las células, al no lograr mantenerse en el músculo cardíaco, se transportan hacia otras zonas del cuerpo. Por eso es que se espera que con esta nueva cápsula, hecha a base de algas, los microorganismos puedan quedarse en la zona sin migrar ni ser atacadas por el mismo cuerpo.

Los investigadores explicaron que las algas contienen alginato, un compuesto que ya se usa en medicina y que, al mezclarse con agua, forma un gel que es utilizado en tabletas y píldoras médicas, sobre todo de liberación lenta, lo que permitiría que las células madre escapen gradualmente.

OMS

Las pruebas y conclusiones

Las células madre son la base de nuestro organismo. Éstas se encuentran, principalmente, en la médula ósea, y son capaces de convertirse en músculo o hueso. El objetivo del trabajo es que, una vez situadas en la zona afectada, puedan convertirse en un nuevo y sano músculo cardíaco.

Los científicos, según una publicación en la revista Biomaterials Science, ya probaron la técnica en ratones de laboratorio, a los que les inyectaron cápsulas en músculos cardíacos afectados por un ataque.

Las conclusiones indican que cuatro semanas después de la intervención, el 41% de los animales presentaron una mejoría en la cantidad de sangre que el corazón es capaz de bombear. Por su parte, en ratones en que las células madre fueron inyectadas sin la cápsula, sólo un 16% obtuvo los beneficios.

Estudio científico
Este artículo se basa en un estudio científico que puede ser sometido a nuevas pruebas para ser validado o descartado. Sus resultados NO deben considerarse concluyentes.