Una denuncia contra la Seremi de Salud Metropolitana se conoció durante este miércoles, por una multa a todas luces injustificada en contra de una mujer que tuvo covid-19.

La denuncia la realizó Kurt Reichhard en una carta enviada al diario El Mercurio, quien relató lo vivido por él y su esposa luego de una fiscalización.

Según contó, fue en marzo del año pasado, cuando recién había llegado el virus a Chile, que su cónyuge estuvo hospitalizada por la enfermedad.

En ese tiempo, personal de la seremi fue a controlarla a su domicilio, debido a que estaba registrada como caso positivo. Pero, obviamente, no estaba.

“Procedió entonces a cursar una infracción por no encontrarse cumpliendo la cuarentena en su domicilio. Por supuesto, oportunamente respondí la citación, informando que ella estaba internada en una clínica; ergo, junto con luchar por su vida, cumplía la cuarentena. Esto lo expliqué también a la PDI”, escribió Reichard.

Tras ello, relató, pasaron 11 meses, hasta que llegó una sentencia firmada por Daniela Zavando, condenando a su esposa a pagar una multa de 50 UTM, poco más de $2,5 millones, esto porque su mujer no cumplió la cuarentena.

¿La explicación? Sus descargos no eran válidos ya que no acreditó representación de su pareja ni tenía poder notarial para hacerlo.

“En dicha resolución rechazan los descargos, porque dicen que no acredité representación de mi señora, quien, postrada en cama, no tuvo la diligencia de defenderse ella ni de concurrir a una notaría a darme poder”, dijo.

La guinda de la torta es que el plazo para apelar venció hace 11 meses, según dijo, por lo que no puede revertir la decisión de la Seremi de Salud.

“Tengo 70 años y estaba agradecido del Gobierno por haberme vacunado. Me duró cinco días el agradecimiento”, cerró el afectado.