La “Escuela de Autodefensa ACAB” se refirió a la polémica en la que se vio involucrada luego que el diputado de Evópoli, Andrés Molina, oficiara a la Universidad de Chile para que le diera explicaciones por presuntas actividades de esta organización en sus dependencias.
ACAB es una sigla en inglés surgida alrededor de la década de los ’70, la que significa “All cops are bastards” (todos los policías son bastardos). Dicho acrónimo se volvió popular en el país tras el estallido social y el cuestionado actuar policial, por lo que es posible verla rayada en cientos de murallas.
A raíz de esto, desde la Universidad de Chile aseguraron que le contestaron el oficio al diputado el pasado 12 de diciembre, instancia en la que indicaron que “luego de una exhaustiva revisión en todas las unidades académicas y administrativas, nuestro plantel no imparte ningún programa extracurricular ni académico con ese nombre ni tampoco de las características señaladas por el parlamentario”
A través de una publicación realizada en su página de Facebook desde la “Escuela de Autodefensa ACAB” se refirieron a esta situación y explicaron que la organización -que funciona de manera gratuita y autogestionada- fue formada hace casi dos años “con el objetivo de difundir e incentivar la práctica deportiva en sectores vulnerados como medio para promover la adquisición de valores como son el autocuidado, la vida sana y la responsabilidad con el entorno social y comunitario”.
Además, indicaron que “en ese mismo sentido que la escuela se plantea la misión de desincentivar el consumo de drogas por medio de la práctica deportiva”. “La escuela presenta un programa de actividad física y deportes de contacto centrada en el boxeo. Ademas, se está trabajando en la implementación de una rama de fútbol formativo, ping pong y otras actividades deportivas”, añadieron.
Descartan vínculo con la Universidad de Chile
Con respecto a la polémica generara a raíz del oficio, explicaron que fueron invitados por el Centro de Estudiantes de Geografía de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile, quienes le manifestaron “su interés por nuestras actividades y la posibilidad de realizarlas en salas destinadas a diversos talleres impartidos”.
“La Escuela de Autodefensa ACAB no cobró ningún tipo de remuneración ni al centro de estudiantes ni a la universidad, como tampoco pidió implementos, siendo éstos llevados por nuestros miembros y ofrecidos para su uso de manera gratuita”, explicaron.
Además, rechazaron el apelativo que les han mencionado como “grupo de guerrilla”. #Comprendemos la intención de hacernos ver como un grupo violento y limitar nuestra labor a ello. Como escuela jamás hemos participado de actos violentos ni hemos incentivado el empleo de lo aprendido más allá de la clase y las competencias deportivas”, añadieron.
“Quisiéramos aclarar también que el hecho de que existan numerosos rayados con la sigla ACAB no tiene nada que ver con nosotros, sino que más bien con una expresión o manifestación del pueblo chileno frente a las innumerables injusticias”, señalaron..
