La investigadora Daniela Haro, de la Universidad Santo Tomás, entregó recomendaciones para evitar el contacto con el cadáver y explicó que son diversas las causas por las que pudo haberse producido el deceso del cetáceo en la comuna de Penco.

El primer día hábil de este 2024 un ejemplar de ballena jorobada fue encontrado sin vida en la playa del sector Cerro Verde Bajo, en la comuna de Penco, región del Bío Bío. El animal, de unos 15 metros de largo, no presentaba lesiones visibles, según informó personal de Sernapesca que llegó al lugar.

Antes de la llegada de la policía marítima, personas captaron a un hombre que tuvo una deleznable actitud. Se subió al vientre del cadáver y se fotografió.

Esta negligencia recibió numerosos reproches en redes sociales.

En esa línea, la Dra. Daniela Haro, investigadora del Centro Bahía Lomas de la Universidad Santo Tomás, conversó con BioBioChile respecto al hallazgo y advirtió los eventuales riesgos al que se exponen las personas al entrar en contacto con el cadáver del cetáceo.

“El animal se encuentra en proceso de descomposición, por tanto, es aconsejable no acercarse al animal y mucho menos tocarlo, para evitar el riesgo de contraer alguna infección“, indicó.

Ballena migraba para alimentarse

Según explicó, es normal ver a este tipo de cetáceos en las costas del país en esta época del año. Expuso que vienen a alimentarse a distintas zonas durante el verano y el otoño.

Las ballenas jorobadas que podemos observar en nuestra costa pertenecen a la población del Pacífico suroriental. Nacen y se reproducen en las aguas entre el norte de Perú y Costa Rica. Luego, en primavera, migran para alimentarse principalmente en la costa oeste de la península Antártica, en el Estrecho de Magallanes o en el Golfo Corcovado”, señaló la experta.

Haro agregó que es muy probable que la ballena encontrada en Penco haya estado migrando a una de las áreas de alimentación de la zona sur de nuestro país.

Sería muy interesante tomar fotografías de la cola del animal varado. Permitiría identificar al individuo y determinar si era una de las ballenas conocidas en el sur de Chile”, indicó.

La investigadora también entregó algunas recomendaciones para actuar en caso de avistamiento o hallazgo de cetáceos.

En el caso de encontrar un cetáceo varado, hay que dar aviso al Servicio Nacional de Pesca y a funcionarios de la Armada. En el caso de realizar avistamientos de ballenas desde una embarcación en el mar, se recomienda mantener una distancia de observación mínima de 100 metros, para evitar perturbar la actividad que estén realizando los animales”, dijo.

También entregó las posibles causas de la gran protuberancia que le apareció al cadáver tras unas horas en la playa. Indicó que son múltiples, que puede ocurrir durante el proceso de descomposición del animal; por la temperatura corporal; por el aire al interior del cuerpo o por gases que se producen en la descomposición; también por posibles golpes de la carcasa del animal muerto, etcétera.

Sernapesca informó que la causa preliminar de la muerte de la ballena se podría deber a una enfermedad, pero que se realizarán las pericias correspondientes para confirmarlo. Asimismo, coordinó el retiro del cadáver de la playa para evitar problemas sanitarios y ambientales.