Como una buena señal calificó el intendente Jorge Ulloa que, tras 17 ataques incendiarios en la provincia de Arauco, en la noche del lunes no haya habido incidentes.

Después del homicidio de Camilo Catrillanca el miércoles de la semana pasada en Ercilla, en la provincia de Arauco se sucedieron ataques incendiarios por las noches.

Pero después de seis jornadas la seguidilla paró en la noche del lunes y la madrugada del martes.

El intendente del Bío Bío, Jorge Ulloa, calificó esta situación como una buena señal, reiterando el llamado al diálogo

Dentro de las pérdidas de los últimos días destaca la del centro turístico Quelén, con más de 2 millones de dólares perdidos en inversión según indicaron sus dueños hace unos días.

Pero también hay que considerar la escuela del sector Ranquilhue en la comuna de Tirúa, la que se quemó por completo tras un ataque incendiario. El alcalde Adolfo Millabur dijo que esperan levantar el recinto educacional.

Consultado el intendente Ulloa sobre la reconstrucción de la escuela y del jardín infantil del mismo sector, que también fue consumido por las llamas, contó que mediante el Ministerio de Educación buscarán alternativas para dar solución a los 105 niños que quedaron sin recinto educacional.

Las autoridades esperan que terminen los ataques incendiarios, en una postura conciliadora y abierta al diálogo, al menos en la región del Bío Bío, como una forma para “bajar la tensión” en la provincia de Arauco.

Respecto al turismo y la baja en las reservas, el intendente anunció que se iniciará una campaña para fomentar la actividad.