Con prohibición de acercarse a la víctima quedó un chofer de Uber, quien fue formalizado por lesiones en contra de un fiscalizador de la seremi de Transportes del Bío Bío a quien intentó arrollar cuando pretendió controlarlo en el aeropuerto Carriel Sur.

El incidente ocurrió la tarde del lunes y la detención ocurrió cerca de las 17:00 horas de acuerdo a los antecedentes dados a conocer en el Juzgado de Garantía de Talcahuano, lugar donde fue formalizado Marco Antonio Hernández Figueroa, de 23 años.

Este último había terminado una carrera por $1.850 frente a la entrada del recinto, instante donde un fiscalizador de la Seremi de Transportes procedía a controlarlo.

No obstante, el hombre intentó escabullirse acelerando su vehículo, lo que habría causado heridas en la pierna izquierda del funcionario que posteriormente fueron constatadas en el Hospital Las Higueras de Talcahuano.

Por lo anterior, fue formalizado por lesiones, delito que tiene una penalidad muy baja y que según el fiscal Julián Muñoz explicó por qué no se le quitó la licencia de conducir porque el tipo de delito por el cual fue aprehendido no permite otro tipo de medidas.

Si la fiscalización se hubiese llevado a cabo, el conductor habría debido cancelar una multa de $450 mil.

Desde el entorno del presunto responsable argumentaron que su reacción se produjo porque no identificó bien al trabajador.

El seremi de Transportes, Jaime Aravena, señaló que la fiscalización se ajustó plenamente a la legalidad ya que no tienen la obligación de portar un uniforme ya que solo requieren la credencial e identificarse al momento del procedimiento.

Además, Aravena insistió que en este momento el servicio de Uber es ilegal y mientras no sea reconocido como un servicio de transporte público la obligación de la autoridad es controlar y sancionar.

La autoridad informó que se han realizado 627 controles por informalidad, 346 partes de los cuales 177 son a Uber, el resto corresponden a otros conductores que son informales pero si plataforma.