La Primera Sala de la Corte de Apelaciones de Valparaíso rechazó el recurso de protección que presentaron la junta de vecinos de Quintay y la Corporación Pro Defensa del Patrimonio Histórico y Cultural de Viña del Mar contra el megaproyecto inmobiliario Condominio y Complejo Turístico Santa Augusta.

Con ello, el tribunal dio luz verde a la aventura inmobiliaria que contempla tres etapas: Costa Quintay, entregado en 2019; Alto Quintay, que se encuentra en obras; y Costa Brava, que aún no ha iniciado sus faenas.

El abogado de la corporación, Gabriel Muñoz, se mostró sorprendido ya que, con anterioridad, el tribunal de alzada había dictado orden de no innovar y detener las obras.

El representante acusó que el proyecto no tiene permiso ambiental, como tampoco estudio de impacto, y afirmó que este profundiza la crisis hídrica en la zona.

En enero, un reportaje de la Unidad de Profundización de BioBioChile reveló que vecinos de Quintay denunciaron que el agua que emanaba desde las cañerías de agua era turbia y altamente contaminada.

Sumado a ello, reportaron que el 90% de los recursos hídricos de Quintay pertenecen al privado Condominio Santa Augusta, lo que ha generado una profunda crisis hídrica que se arrastra desde 2011.

Muñoz señaló que recurrirán a la Corte Suprema por considerar que el proyecto vulnera el derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación.

Según Portal Inmobiliario, los precios por unidad en la etapa Alto Quintay parten en 5.682 unidades de fomento: $163 millones.