“Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias”. Con estas palabras se expresó Félix Avilés, padre de Rodrigo -joven que quedó en riesgo vital tras recibir un disparo del carro lanza agua durante la marcha del 21 de mayo de 2015 en Valparaíso- respecto del juicio contra el excarabinero que provocó las heridas.

El familiar declaró ayer martes en la segunda jornada del juicio oral por el caso de su hijo, ocasión en la que también entregó su testimonio la médico perito del Servicio Médico Legal y el médico neurocirujano del Hospital Carlos Van Buren, quien fue parte del equipo que atendió a Rodrigo Avilés.

También declararon testigos oculares del hecho, como otros estudiantes que también sufrieron agresiones de Carabineros –en diferente grado-, además de los paramédicos que socorrieron al joven.

Según las palabras de Félix Avilés, Carabineros le habría imputado una conducta delictual mientras se encontraba grave en plena calle.

A partir de los antecedentes, indicó el padre, llegarán “hasta las últimas consecuencias”, especialmente ante la posibilidad de que “tengan incluso el descaro de pedir el sobreseimiento” del excarabinero Manuel Noya, imputado por las lesiones.

“Hemos tenido la paciencia y la tolerancia para poder vivir estos casi tres años y medio de una investigación difícil, llena de barreras, obstáculos y mentiras por parte de la institución (Carabineros)”
- Félix Avilés, padre de Rodrigo

Hoy miércoles es el tercer día de juicio oral y se presentarán los resultados de los peritajes de los carros lanza agua y también declararán testigos del caso. El juicio podría durar hasta este jueves, instancia en la que declarará el general en retiro Ricardo Cartagena, quien comandaba la unidad de Fuerzas Especiales que intervino en las manifestaciones donde Avilés resultó lesionado.