Prohibición perpetua para conducir un vehículo motorizado más el pago de $35 millones de pesos a la familia de la víctima, es la sanción que ha comenzado a cumplir el empresario curicano Luis Paredes Núñez.

Recibió dicha sentencia tras ser condenado por haber provocado una fatal colisión múltiple en mayo del 2017 mientras conducía en estado de ebriedad por la Ruta 5 Sur, constató el Diario El Centro.

El accidente ocurrió en la carretera frente a Curicó, y dejó como saldo a una persona muerta y daños millonarios en los vehículos involucrados.

En la mañana de este miércoles se desarrolló la audiencia de juicio abreviado, en que la fiscalía junto al querellante mantuvieron la acusación contra Paredes como el autor del delito de conducción en estado de ebriedad provocando daños y muerte.

Por ello, solicitaron al Tribunal de Garantía que se aplicara la máxima pena para este delito: cinco años privado de libertad, recordando que el sujeto logró demostrar como antecedente su irreprochable conducta anterior.

La tragedia

El fatal accidente se produjo a eso de las 19:30 horas del lunes 29 de mayo del año pasado, cuando Luis Paredes, con 2,89 gramos de alcohol por litro de sangre en su cuerpo, impactó con su vehículo a un automóvil, dos camiones y una camioneta.

El conductor de ésta última falleció en el lugar. Se trataba de Luis Alejandro Aravena Canales (de 45 años), ingeniero agrónomo y padre de tres hijas, quien a esa hora regresaba a su hogar en el sector de La Obra-Los Niches.

Con estos antecedentes en mano, y luego de que el empresario estuviera en prisión preventiva desde mayo a diciembre pasado, y luego con arresto domiciliario total, el tribunal determinó condenar como culpable del hecho a Luis Paredes.

Se le decretaron cinco años de presidio, los que serán sustituidos por libertad vigilada intensiva, además de la inhabilitación para conducir vehículos motorizados, junto al pago de 12 unidades tributarias mensuales (UTM).

Indemnización

Ante de llegar a este procedimiento abreviado ante el Tribunal de Garantía, ambas partes, acusado y la familia de la víctima fatal, arribaron a un acuerdo ante notario en torno a una transacción, en la que Luis Paredes se vio obligado a pagar $35 millones de pesos a la esposa y las tres hijas del fallecido.

Sobre esto último el abogado querellante, Marco Rivera, precisó que la pena asignada se encuentra ajustada a derecho, ya que es además es la sanción que “hemos solicitado ambas partes”, y que la indemnización “llega tras una transacción dolorosa para la familia, ya que una vida, no tiene precio, y no devuelve a un padre, a un esposo, ni a un jefe de familia”.

El duelo

“En este caso, es doloroso, pero se debía velar por bienestar de tres niñas, sus estudios en la universidad, y por una madre que toda su vida se preocupó por ellas, y por ello se comprende que la muerte del jefe de familia es un cambio radical en sus vidas”, explicó Rivera.

En torno a la inhabilitación perpetua para acceder a licencia de conducir, e inhabilitación perpetua para guiar vehículos motorizados, Rivera acotó que si el acusado incumple, “él estaría incurriendo en un nuevo delito, y eso sería causal para revocar su libertad vigilada intensiva con la cual fue beneficiado”.

Por su parte el abogado defensor, Sergio Monsalve, reconoció que “no impugnamos la alta pena impuesta, aceptamos el tope máximo porque entendemos la gravedad de los hechos, y mi defendido eso lo tiene muy claro”.

Para el próximo 17 de agosto se fijó una nueva audiencia en este caso, en que se determinarán las condiciones de aplicación de los cinco años de libertad vigilada intensiva.