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Integrantes del Liceo Bicentenario Gabriela Mistral de Máfil, Región de Los Ríos, se movilizaron debido al pago parcial de sueldos a profesores, falta de calefacción y ausencia de transporte escolar en zonas apartadas. La protesta interrumpió el Concejo Municipal y el alcalde confirmó la posible instalación de un administrador provisional.

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El pago parcial de sueldos a profesores, falta de calefacción suficiente en el recinto y ausencia de transporte escolar en zonas apartadas, provocó la movilización de integrantes del Liceo Bicentenario Gabriela Mistral de Máfil, región de Los Ríos, convocada por el Centro General de Apoderados y a la que adhirieron alumnos, profesores y paradocentes, quienes incluso llegaron hasta el municipio, interrumpiendo la sesión del Concejo Municipal.

A su vez, el alcalde de la comuna, Claudio Sepúlveda, confirmó que se evalúa instalar un administrador provisional.

La presidenta del comité estudiantil del establecimiento, Antonia Maldonado, lamentó que existan tantas dificultades para recibir educación.

La presidenta del Centro General de Apoderados, Ingrid Soto, aseguró que como liceo no tienen nada de “Bicentenario”, frente a todos estos problemas.

El alcalde de Máfil, Claudio Sepúlveda, afirmó que trabajan con el Gobierno una figura para garantizar los sueldos a los profesores, lo que se concretaría a través de un administrador provisional.

El municipio tiene una deuda previsional que supera los 1.800 millones de pesos, generando una especie de “castigo” en la recepción íntegra de los recursos provenientes del Ministerio de Educación.

Ante ello, el gobernador Regional, Luis Cuvertino, dijo que el caso de Máfil es uno de los tres más graves en Chile.

El municipio de Máfil espera, por un lado, que el Ministerio de Hacienda absorba el déficit financiero, y en paralelo, un informe de la Superintendencia de Educación para concretar la figura de administrador provisional.

Esta regirá para todos los colegios municipales de la comuna, y así garantizar los sueldos de aquí a diciembre, y con ello dejando el municipio esa responsabilidad antes del traspaso en enero de la administración de la educación al SLEP.

También, con los aportes municipales que utilizaban para completar los salarios, el alcalde dijo que podrán costear el transporte escolar rural, que ha dejado a alumnos sin ir a clases, que por lo demás, resta en la subvención escolar.