Continúa el descontento y la desconfianza por parte de la comunidad en Osorno respecto de la potabilidad del suministro de agua en la ciudad -que está siendo distribuida por la empresa Essal- luego de la contaminación con petróleo en la planta de producción en el sector de Caipulli.

Así lo han manifestado diversas agrupaciones sociales en las que destacan la mesa social de Osorno, que reúne a cerca de 25 agrupaciones; la Unión Comunal de Juntas de Vecinos y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), quienes llamaron a las autoridades a clarificar la información con la comunidad para la tranquilidad de los vecinos.

Así lo explicó Mauricio Navarrete, representante de la Mesa Social, quien argumentó que resulta imperante que hoy se analice la posibilidad de que la distribución del agua sea traspasada al Estado pero que esto debe funcionar con autoridades responsables.

Claudio Millaguin, presidente provincial de CUT, argumentó que es de suma importancia concientizar los datos entregados por el Instituto de Salud Pública respecto de las muestras de agua tomadas en la ciudad.

Lo anterior, esgrimió, producto de la desconfianza que existe en la comunidad, destacando además que la entrega de información sea acorde con los vecinos y no con tecnicismos, puesto que explicó que la ciudadanía tiene el derecho de conocer los reportes.

La problemática se mantiene toda vez que -según explican las organizaciones- hoy existe desconfianza por la utilización y el consumo del agua distribuida por la red domiciliaria, donde los vecinos aluden a que la información entregada por parte de las unidades técnicas no ha sido clara.