La declaración del abogado del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural (Serpat), José Cortés Vergara, reveló la estrategia de la familia Allende para continuar manteniendo el control de la casa del fallecido expresidente luego de vendérsela al Fisco.
Se trata del testimonio que entregó el funcionario ante la Fiscalía el pasado 21 de enero, en el marco de la investigación que lleva adelante el Ministerio Público luego del fallido negocio.
Recordemos que el caso provocó la apertura de una causa penal por fraude al fisco que investiga el fiscal Patricio Cooper. Además, se sumaron acciones ante el Tribunal Constitucional en contra de la ministra Maya Fernández y la senadora Isabel Allende.
Esto último, debido a que la Constitución prohíbe a las autoridades en ejercicio celebrar contratos con el Estado. Por lo mismo, en la oposición evalúan presentar una Acusación Constitucional en contra de la titular de Defensa.
No obstante, con el paso de los días se han ido conociendo nuevos antecedentes que complican aún más a la familia Allende.
Según publica Ciper, en una reunión realizada en marzo del año pasado, el abogado Felipe Vio, representante de la familia y yerno de la senadora Isabel Allende, y el arquitecto Genaro Cuadros se encontraron con el asesor del Servicio del Patrimonio y las Culturas (Serpat), José Rafael Cortés Vergara, en el Palacio Pereira.
En la cita presentaron un proyecto de adquisición, restauración y habilitación de la casa museo titulado “Guardia Vieja 392, Casa Museo Presidencial Salvador Allende Gossens”.
La idea de la familia Allende era que, tras la compra por parte del fisco en $993 millones, el inmueble fuera cedido en comodato a la Fundación Salvador Allende, donde la senadora Isabel Allende era miembro honorario, junto a su hija Marcia Tambutti Allende, pareja del abogado Felipe Vio.
En otras palabras, se buscaba mantener el control sobre el inmueble una vez que se concretara el millonario negocio.
“Se propone la adquisición por parte del Fisco de Chile de esta propiedad para ser destinada a una casa museo que conservara la memoria del expresidente Allende, proponiendo un modelo de gestión que involucre la Fundación Salvador Allende (FSA), que recibiría en comodato de parte del fisco”, señaló Cortés.
Asimismo, el funcionario declara que la idea era que tras la compraventa, “se propone la creación de la Fundación Casa Museo Salvador Allende, quienes se harían cargo de la administración de la propiedad”.
Según pudo constatar Ciper, se trataba de una estrategia inédita, ya que hasta la fecha ningún inmueble comprado por el Fisco, ha sido entregado en comodato a un tercero.
A esto se suma que los dineros para la compra provenían del presupuesto del Servicio del Patrimonio y las Culturas (Serpat), pese a que el negocio lo estaba realizando el Ministerio de Bienes Nacionales.
Contactados por el mismo medio, tanto el Servicio de Patrimonio y las Culturas, como la senadora Isabel Allende, la ministra de Defensa, Maya Fernández, así como la propia Fundación Salvador Allende, declinaron dar declaraciones por haber un proceso judicial en curso.
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