El republicano Juan Irarrázaval aseguró que escucharán "un discurso populista y alejado de los grandes problemas del país" durante la Cuenta Pública del presidente Boric. Además, criticó que se destaquen los "primeros legados" de La Moneda, asegurando que están "mirándose el ombligo".

El diputado Juan Irarrázaval, del Partido Republicano, aseguró que su colectividad no tiene grandes expectativas de la Cuenta Pública de este jueves.

“Estamos preparados para escuchar un discurso populista y alejado de los grandes problemas del país, como ha sido el actuar permanente del presidente Boric desde que asumió el cargo”, señaló.

Asimismo, el parlamentario afirmó que a La Moneda “no le interesa llegar acuerdos y busca imponer de manera forzada sus intereses”.

Irarrázaval critica “legados” del Gobierno

Este lunes, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, aseguró que el discurso de Boric estará enfocado en resaltar los “primeros legados” del Gobierno en sus primeros 14 meses.

Entre estos hitos, destacó la aprobación de los proyectos de jornada laboral de 40 horas y royalty minero.

Ante ello, Irarrázaval indicó que el Ejecutivo está “mirándose el ombligo, mientras que en Chile las familias se encierran en sus hogares por temor y tratan de sobrevivir como pueden”.

“La ciudadanía ha perdido la esperanza en este Gobierno completamente y esperan acciones concretas que solucionen sus verdaderos problemas, y no en ese país ficticio que ha intentado construir esta administración”, agregó el republicano.

“Nos hemos encontrado con soluciones parches”

Desde su punto de vista, los grandes temas son la delincuencia, la inmigración ilegal, el narcotráfico, la inflación y la violencia rural en la Macrozona Sur.

“Estas urgencias se tienen que atacar desde el minuto uno, pero nos hemos encontrado con soluciones parches del Ejecutivo que sólo han contribuido a tener un Chile inestable y sumergido en una crisis total”, dijo al respecto.

Finalmente, aseveró que incluso dentro de los partidos oficialistas hay “desilusión”, ya que “no creen genuinamente en el liderazgo del jefe de Estado”.