A raíz de la elección de las y los nuevos integrantes del Tribunal Supremo, el senador Rojo Edwards -y sus adherentes- acusaron que podrían ser expulsados del Partido Republicano. Asimismo, aseguran que la actual directiva quiere tener el control total y dijo que lo ideal es "tener poderes internos separados".

Una serie de situaciones reactivó la preocupación del senador Rojo Edwards y sus adherentes en el Partido Republicano, agrupados en el movimiento Un Militante Un Voto (UMUV), pues afirman que está la posibilidad de que los expulsen del partido.

La molestia habría comenzando cuando el senador Edwards, tras el triunfo del Rechazo en el pasado plebiscito del 4 de septiembre, renunció a la presidencia de Republicanos.

Posterior a eso, Edwards protagonizó las elecciones internas del partido, pero de una manera indirecta ya que las dos listas que competían era, por un lado, la de José Antonio Kast -el fundador de Republicanos- representada por Arturo Squella y, por otro lado, Francisco Castellón representando la lista del senador.

La tensión aumentó cuando los resultaron indicaron una clara superioridad de la lista Squella-Kast que logró un total de 6.077 de los 7.072 de los votos a nivel país (85,9%). En tanto, la facción apoyada por Edwards sólo obtuvo un 13% con 920 sufragios.

Tras la mencionada votación de carácter interna, los integrantes de UMUV aseguraron ser excluidos de diferentes grupos informativos -en WhatsApp- lo que conllevó a las críticas al interior del mismo Partido Republicano.

En ese sentido, según consignó La Tercera, el grupo acusó que la franja televisiva de las y los candidatos del Consejo Constitucional se “presidencializó” por el uso de la figura de José Antonio Kast.

En cuanto a una supuesta expulsión, la acusación del grupo republicano radica en que, a partir hoy, se elegirá a las y los nuevos integrantes del Tribunal Supremo que, recordemos, permite que los partidos denuncien a sus militantes y -eventualmente- decida su expulsión.

Considerando las facultades de ese tipo de tribunales, y acusando que la directiva quiere tener el control total, el senador Edwards aseguró que el Partido Republicano debe “tener poderes internos separados, especialmente en la justicia interna, que es el organismo encargado de tomar decisiones que afectan directamente a los militantes”.

Declaración que fue compartida por Francisco Castellón, excandidato en la derrotada lista de Edwards, quien dijo que “la concentración de poder no es sana” y acusó exclusión solo por “querer democratizar el partido”.

Agregando que “estamos expuestos y más ahora que la directiva pretende mantener el control sobre el Tribunal Supremo”.

Finalmente, en la misma línea de las declaraciones anteriores, Cristián Kunstmann -excandidato a la directiva republicana- indicó que “estamos frente a un escenario muy complejo” ya que se quiere elegir a los mismos cinco integrantes que actualmente conforman el Tribunal Supremo, mediante lista cerrada y por mayoría simple“.

“Esto es antidemocracia, antilibertad, anti todos los principios que defendemos como republicanos”, cerró Kunstmann.