La Sala de la Cámara de Diputados aprobó, por unanimidad, la iniciativa que cambia la figura de la “prostitución” por “explotación sexual” para personas menores de 18 años. El proyecto continuará ahora su segundo trámite constitucional en el Senado.
Avanzar en la protección penal de las víctimas de explotación sexual comercial, cuando afecte a niños, niñas y adolescentes, es el objetivo del proyecto aprobado y despachado, por la unanimidad de 114 votos favorables, por la Sala de la Cámara.
El proyecto, que fue iniciativa del Gobierno, modifica el Código Penal, con el fin de tipificar delitos relativos al proxenetismo, explotación sexual y pornografía de menores de edad, según publica la web de la Cámara.
Lo anterior, considerando que la actual redacción considera la prostitución infantil, lo que implica un error, por el nivel de voluntariedad de las y los menores. Asimismo, niega su calidad de víctima y la asimetría que existe entre la o el menor y su victimario.
El texto recogió sugerencias de instituciones y de la sociedad civil planteadas en los últimos 20 años.
Destacar que el delito de explotación sexual comercial se considera como uno de las más graves vulneraciones a los Derechos Humanos, porque se afecta la vulnerabilidad de niños, niñas y adolescentes (NNA) en su integridad física, síquica y social para ir en beneficio propio o de un tercero.
El proyecto, que inició su tramitación en junio de este año, busca, entre otros puntos, diferenciar los delitos de estupro y abuso sexual propios e impropios. Además, cambia la figura de la “prostitución” por “explotación sexual” para personas menores de 18 años.
De esta forma, define como explotación sexual la utilización de un menor de 18 años para la realización de una acción sexual. Esto también se entenderá si dicha acción de significación sexual se realiza a cambio de cualquier tipo de retribución.
Además, sanciona la comercialización o difusión de material pornográfico de menores de 18 años.
Para ello, se incluye toda representación de actividades sexuales explícitas, reales o simuladas, junto a la representación de sus partes genitales, con fines primordialmente sexuales, o en aquella en que se emplee su voz o imagen.
Las penas para explotación sexual y pornografía de menores
La propuesta legal establece varias penas para los distintos delitos de explotación sexual comercial y pornografía de menores:
Las conductas de comercialización, distribución, difusión y exhibición se entenderán cometidas en Chile cuando se realicen a través de un sistema de telecomunicaciones al que se tenga acceso desde territorio nacional.
Finalmente, se estableció que los delitos previos a la vigencia de esta ley serán determinados con la ley vigente al momento de haber sido cometidos.