Una de las primeras reacciones que emanaron luego de darse a conocer las faltas del actual subsecretario de Desarrollo Regional, Felipe Salaberry, vino de parte de la Federación Nacional de Asociaciones de Funcionarios del Ministerio del Interior y Servicios Afines (Fenaminsa).

El organismo cuestionó la postura del Gobierno de no retirar de su cargo a Salaberry, tras darse a conocer que pasó tres luces rojas, insultó a un funcionario municipal y, posteriormente, intentó evitar la infracción con ayuda de su hermana, situaciones dadas a conocer por la Unidad de Investigación de Radio Bío Bío este jueves.

El presidente de los funcionarios de Interior, Esteban Tumba, argumentó que el Ejecutivo no asume que la denuncia la hace un inspector municipal, ministro de fe con plenas competencias para establecerla.

Según informaron desde la entidad, la denuncia es coherente con una serie de acciones que se han registrado en la Subsecretaría de Desarrollo Regional, las que han generado un pésimo clima laboral.

“El acoso permanente de personal de Gabinete del Subsecretario a funcionarios y funcionarias, incluso a personal de su confianza; intento de contratación de personas con gran prontuario judicial para cargos de gestión financiera (…) Sumarios dirigidos a dirigentes y personal por montones; despidos arbitrarios calificados ya por la Corte Suprema; despidos discriminatorios calificados por tribunales del Trabajo; falta de conducción del proceso de descentralización”, entre otros que dieron a conocer.

Desde el organismo enfatizaron en un llamado al Gobierno a retirar a la autoridad de su cargo para “fortalecer la credibilidad en las instituciones y la política pública”.