La tarde de este lunes, la canciller subrogante, Carolina Valdivia, explicó por qué el Gobierno no pudo traer de regreso a Chile a María Inés Contreras, la mujer de 68 años que murió en Cancún tras sufrir una falla multisistémica luego de sufrir la amputación de una pierna.

En concreto, Valdivia aseguró que como Ministerio de Relaciones Exteriores aplicaron los protocolos correspondientes en el caso y explicó que debían pedir la autorización del equipo tratante para concretar el traslado.

No obstante, Valdivia dijo que el director del hospital donde la mujer se mantenía internada les comunicó que ello no era posible debido al estado de salud que tenía la paciente.

Aquello se contrapone a lo manifestado a El Trasnoche de Radio Bío Bío por Fabián Valderrama, uno de los hijos de la mujer, quien desmintió a Valdivia y aseguró que los médicos que trataron a su madre sí dieron el visto bueno para su regreso a casa.

Además, Valderrama, quien criticó la postura del Ejecutivo, a quienes acusó de inoperantes; reiteró que una representante del cónsul le expresó la imposibilidad de conseguir un avión ambulancia a menos que ellos mismos como familia lo costearan (US$80 mil).

Por su parte, el ministro de Salud, Emilio Santelices, afirmó este lunes que el sábado se comunicó con el director del Hospital Regional de Cancún, quien le transmitió la tranquilidad que estaban tomando todas las medidas necesarias con la mujer.

En el mismo contacto, Santelices añadió que el facultativo le entregó antecedentes y detalles pormenorizados de su evolución.

Finalmente, desde la Cancillería afirmaron que ofrecieron su ayuda para la repatriación del cuerpo de Contreras.

Pese a ello, desde su familia manifestaron que ellos se harán cargo de traer los restos a casa y lamentaron el nulo apoyo de las autoridades.

Contreras viajó hasta la Península del Yucatán junto a dos de sus hijos, quienes contrayeron matrimonio con sus respectivas parejas.