El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, negó durante su visita a Chile ser xenófobo, machista, misógino y racista como le catalogan sus detractores.

Tras las discusiones sostenidas en el marco de la Cumbre de Prosur efectuada en La Moneda, el mandatario extranjero se acercó a la prensa local en el patio de los cañones, donde argumentó que “si yo fuese xenófobo, machista, misógino, racista, ¿cómo pude ganar las elecciones de Brasil?”.

“Mentira, fake news. Y esas personas están creyendo en las fake news”, acusó la autoridad brasileña, agregando que “tenemos que abrir la mente y usar aquello que hice en la campaña de Brasil. En la campaña yo usé un pasaje bíblico: Juan 8:32 ‘conoceréis la verdad, y la verdad los liberará”.

En conclusión, defendió que “entonces si yo fuera todo eso… las mujeres votaron contundentemente, los negros y los homosexuales”.

Los dichos

Bolsonaro respondió de esta forma tras ser cuestionado por su historial de polémicos dichos, los que le han acompañado por gran parte de su carrera política.

En 2003 le dijo a la diputada de izquierda Maria do Rosario “no te violaría, porque no lo mereces”, declaraciones que explicó en diciembre de 2014 al diario Zero Hora: “Ella no merece ser violada porque es muy fea, no es de mi tipo, nunca la violaría. No soy violador, pero si lo fuese, no la violaría porque no lo merece”.

Respecto de la homosexualidad, afirmó ante la revista Playboy en junio de 2011 que “sería incapaz de amar a un hijo homosexual. No seré hipócrita: prefiero que un hijo muera en un accidente a que aparezca con un bigotudo”.

Además de esto, ha enfrentado acusaciones de racismo, luego de que en 2011 afirmara a la cantante y animadora Preta Gil -hija de Gilberto Gil- en el programa CQC de TV Bandeirantes que “no voy a discutir de promiscuidad con nadie. No corro ese riesgo, porque mis hijos fueron muy bien educados y no vivieron en ambientes como lamentablemente es el tuyo” cuando ella le preguntó cómo reaccionaría si uno de sus hijos se enamorase de una negra. Posteriormente Bolsonaro dijo que había entendido mal la pregunta y que creía que se refería a una posible relación homosexual de alguno de sus hijos.

En 2017 volvió a ser cuestionado, cuando en el Club Hebraica de Rio de Janeiro, mientras contaba una visita a una comunidad quilombola de descendientes de esclavos fugitivos afirmó que “el afrodescendiente más liviano pesaba siete arrobas. ¡No hacen nada! Me parece que ya no sirven ni para procrear”.