Francisco Sanhueza, chofer de la máquina Tur Bus que volcó en Mendoza en febrero pasado causando la muerte de 19 pasajeros, dio por primera vez su versión de los hechos, negando haber ido a exceso de velocidad.
Sanhueza, detenido en la cárcel de Boulogne Sur Mer, es el único imputado en esta causa que investiga la mayor tragedia vial que ha tenido la provincia argentina.
Según informó el medio trasandino Los Andes, el chofer presentó su testimonio de manera voluntaria ante el fiscal de la causa, Gustavo Pirrello y los abogados defensores de las víctimas del accidente.
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“Al pasar el paso de Aconcagua, había autos que estaban en contramano iluminando y él pensó que seguía la recta. De golpe se tragó la curva. Hizo todo lo humanamente posible para doblar, todas las maniobras que pudo y se volcó el micro”, aseguró el abogado de Sanhueza, Ángel Cruz Cappi.
Además, el chofer negó que circulase rápido la madrugada del accidente y que pasajeros le pidieran bajar la velocidad asegurando que en el momento del accidente iban todos dormidos.
“Dejó claro que la intención suyas no fue dañar a las personas”, insistió su abogado.
El objetivo de la defensa de Sanhueza es que la imputación cambie de homicidio simple a homicidio culposo, lo que le permitiría evadir la prisión.
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La audiencia de prisión preventiva del chofer se efectuará el martes 2 de mayo.
