Corea del Norte calificó como “histórico” y “sorprendente” el encuentro del fin de semana entre su líder Kim Jong Un y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

En un despacho difundido el lunes, la agencia norcoreana KCNA dijo que ambos líderes resolvieron “retomar y dar un impulso a diálogos productivos” en pos de la desnuclearización de la península coreana.

Después de una invitación por Twitter que Trump lanzó el sábado, los dos dirigentes se encontraron un día más tarde en la zona que divide la península coreana desde hace 66 años.

Kim y Trump se dieron un apretón de manos a través de la Línea de Demarcación, e instantes más tarde el mandatario estadounidense cruzó los pequeños bloques e ingresó formalmente al territorio de Corea del Norte.

Se trata del primer presidente de Estados Unidos a pisar el suelo norcoreano.

“Los máximos líderes del Partido del Trabajo y de Estados Unidos intercambiaron un histórico apretón de manos en Panmunjom”, apuntó KCNA, para añadir que se trató de un “evento sorprendente”.

KCNA señaló la elevada carga histórica del evento, ya que la aldea donde ahora se alza el centro de control de la frontera es un “lugar que se tornó conocido como el símbolo de la división”.

La agencia destacó que el encuentro ocurrió “ante una sugerencia de Trump”.

Brendan Smialowski | Agence France-Presse
Brendan Smialowski | Agence France-Presse

Luego de la reunión con Kim, Trump dijo que las dos partes acordaron que en apenas semanas se retomarán conversaciones a nivel de trabajo sobre el arsenal norcoreano.

De acuerdo con KCNA, Kim y Trump discutieron “temas de interés mutuo y los intereses que se convirtieron en obstáculos en la solución de los problemas”.

“Los dos líderes también acordaron permanecer en estrecho contacto en el futuro”, añadió.

Demócratas escépticos tras reunión entre Trump y Kim

Varios candidatos a las primarias demócratas para las elecciones presidenciales de Estados Unidos comentaron con escepticismo la reunión entre Donald Trump y Kim Jong Un, que percibieron más como una “sesión fotográfica” que como un avance real hacia la desnuclearización norcoreana.

“No veo problemático reunirse con Kim Jong Un en Corea del Norte o en otro sitio. Si podemos desembarazarnos de las armas nucleares (norcoreanas) será muy bueno”, dijo a la ABC el senador independiente por Vermont, Bernie Sanders.

Pero “no quiero que se trate simplemente de una sesión fotográfica ¿qué sucederá mañana y pasado mañana?”, añadió.

Sanders, que se define como “socialista”, manifestó también su preocupación por las “increíbles incoherencias” del presidente republicano, que ha “debilitado” a la diplomacia estadounidense. “Debemos avanzar a nivel diplomático, no sólo posar para unas fotos”, destacó.

“No sabremos si esto funciona hasta que no haya resultados”, dijo a su vez a CNN la senadora por Minnesota Amy Klobuchar, y agregó que no observa un “camino claro” para continuar las negociaciones con Pyongyang.

“Por supuesto, como país queremos que funcione”, comentó.

“Soy siempre favorable a hablar con nuestros adversarios, a abrir canales diplomáticos”, declaró, también en CNN, Julian Castro, pero criticó la perspectiva “errática y desordenada” de Trump en las discusiones con Kim, que “hasta ahora han fracasado”.

“No estoy seguro de saber por qué este presidente quiere promover con tanto ahínco a un dictador como Kim Jong Un cuando (éste) no ha cumplido con las promesas que realizó” en Singapur, dijo el exalcalde de San Antonio.

La reunión de último minuto entre ambos presidentes en la DMZ, la zona desmilitarizada que separa a las dos Coreas, simboliza el carácter de Trump, señaló Castro: “Es puro espectáculo, algo simbólico, sin sustancia”.