Migrantes ecuatorianos protestaron este lunes a las afueras de la estación migratoria Siglo XXI en Tapachula, sur de México, debido a que el Instituto Nacional de Migración (INM) les suspendió la entrega de oficios de salida, que les permiten poder regular su situación irregular en el país.

Los migrantes, quienes acudieron con cartulinas y acompañados de abogados especializados en materia migratoria, acusan que se han quedado estancados en el fronterizo estado mexicano de Chiapas, sin poder avanzar a los Estados Unidos.

Irene Echiza y Walter Fabián Topanta, fueron detenidos desde hace 22 días por el INM y estuvieron recluidos, en espera de que les entregaran documentos, aunque ninguno de los dos pudo obtener los oficios de salida.

La autoridad migratoria dejó salir a Irene Echiza, el pasado 8 de febrero; sin embargo, su marido permanece detenido y manifestó su preocupación, ya que su tiene hipertensión arterial y no cuenta con su tratamiento.

Echiza, es cajera polifuncional de profesión en Ecuador y su esposo, de 40 años de edad, es chofer. A este último, le han prometido que va a salir.

“Estoy pidiendo que lo suelten porque ya son demasiados días y está delicado de salud, ayer estuve hablando con él y me dice que está delicado de salud por la falta de su tratamiento médico”, comentó.

Este grupo de personas, con los representantes jurídicos, pegaron las cartulinas sobre las vallas metálicas que sirven de protección de la estación migratoria, en las que demandaron al Gobierno mexicano les entrega los oficios de salida al grito de “Queremos oficios de salida, queremos oficios de salida”, los migrantes advirtieron que seguirán pidiendo sus papeles para salir de esta ciudad fronteriza con Guatemala y en la que han pasado meses varados.

Los migrantes ecuatorianos que se han entregado y salido sin documentos, explicaron que tienen que ir a firmar por 10 días seguidos y permanecer en Tapachula, sin que las autoridades migratorias mexicanas les brinden mayor información.

Los migrantes permanecieron protestando alrededor de una hora y una parte se trasladó a las oficinas de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para interponer unas 250 y presionar al INM, a fin de que les pueda otorgar sus documentos.