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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

El meteorólogo Iván Torres regresó al matinal Buenos Días a Todos de TVN tras superar una grave enfermedad que lo dejó al borde de la muerte. Inicialmente pensó que su dolor de espalda se debía a un disco gastado, pero en realidad era por cálculos renales que derivaron en una septicemia multiorgánica. Estuvo en estado crítico, casi dos semanas sin poder ser operado debido a la gravedad de la infección.

El meteorólogo Iván Torres volvió al matinal Buenos Días a Todos de TVN este miércoles y reveló que vivió un complejo episodio de salud que lo mantuvo con riesgo vital.

Torres contó que todo comenzó con un fuerte dolor en la espalda, que
él atribuyó a “un disco gastado”, debido a que es muy tolerante al dolor.

Sin embargo, el diagnóstico real era mucho más grave: cálculos renales que derivaron en una septicemia multiorgánica, una infección que compromete varios órganos y que lo dejó en estado crítico.

“Llegué inconsciente a la clínica, llegué de madrugada y además de eso tuve una septicemia multiorgánica, según los doctores”,
parte diciendo Torres.

“¿Con compromiso vital?”, pregunta el animador Eduardo Fuente.

“Claro, estuve grave con septicemia, pero lo curioso, es que sin fiebre, solamente transpiraba mucho. De ahí obviamente me querían hasta intubar, me hicieron exámenes y se dieron cuenta que tenía algo en el riñón”, relató.

Al comienzo, los médicos pensaron que eran solo cuatro cálculos, pero durante la intervención descubrieron una situación mucho más compleja.

Debido a la gravedad de la septicemia, los equipos médicos no pudieron operarlo de inmediato. Torres permaneció casi 15 días con antibióticos de alta potencia, finalmente pudieron intervenirlo, casi dos semanas después de su ingreso.

“Estuve más de 8 días en la clínica, en la UCI, producto justamente de esta gran infección que tenía adentro, después de casi 15 días con antibióticos, recién me operaron el 10 de noviembre”, explicó.

El médico me dice que como máximo él había sacado cuatro cálculos. Yo tenía siete. Quedé con siete heridas, laceraciones en el riñón y la uretra”, agregó.

Tras la operación, debió llevar un catéter desde el riñón a la uretra, etapa que describió como “tremendamente dolorosa”.

“Cuando iba al baño yo le pegaba combos a la muralla por el dolor, era un espantoso… y eso que soy tolerante al dolor”, comentó.

Recién el 24 de noviembre le retiraron el catéter, y a los pocos días comenzó a sentirse recuperado. Aun así, reconoció que fue una experiencia donde la pasó mal.

Con su regreso, el querido meteorólogo retoma su rol en las mañanas de TVN, siendo recibido por sus compañeros del “Buenos Días a Todos”.