La serie narra la historia de diferentes chilenos adoptados en Europa y su búsqueda por saber la verdad y reencontrarse con sus familias biológicas.

“Nos separaron. Nos vinieron a buscar. Nos subieron a un avión. De a poco nos decían la verdad: que veníamos de un lugar lejano”. Esa es una de las frases con la que el trailer de Adoptados: La historia que nos falta, tantea lo que se verá en su serie documental.

El programa, que se estrena el 12 de marzo en TVN, sigue diferentes relatos sobre las más de 20 mil adopciones irregulares al extranjero que se realizaron durante la dictadura de Augusto Pinochet. Las personas que, en antaño, fueron esos niños separados de sus familias biológicas buscan reencontrarse con sus raíces.

“Esta serie demoró casi tres años, pero su origen da lugar a unos cuatro, cinco años antes”, cuenta a BioBioChile Cristián Leighton, director de la serie, conocido también por Colonia Dignidad: Una secta alemana en Chile o Los patiperros.

“Nosotros estábamos haciendo otra serie llamada Mi Familia Chilena. Pero ahí, en Italia, nos encontramos con que había 500 personas que habían nacido en Chile y que habían sido adoptadas por familias italianas”, recuerda.

Entonces, junto a la producción, “empezamos a investigar y nos dimos cuenta de que estos fenómenos se replicaban en varios países y ciudades de Europa. Estas correspondían a una etapa que era fundamentalmente en los años 80 en Chile, donde familias europeas adoptaron a chilenos”, continúa.

Así, entre las dificultades del idioma, donde la gran mayoría de sus investigaciones se hicieron en inglés y francés, además del desafío de lograr que los adultos quisieran compartir sus historias, todo fue dando forma.

Adoptados muestra de forma cercana la historia de bebés y niños que salieron de tierra nacional para ser adoptados en familias de países como Francia, Italia, Suecia, Alemania, entre otros países europeos. Algunos buscan reencontrarse con sus familias, mientras que otros recién se encuentran en el inicio de la búsqueda.

Entre dulce y agraz: la búsqueda por un reencuentro

Entre la frustración y la resiliencia, se logró incluso poder acompañar a algunas familias en este primer reencuentro, tanto por internet como en persona.

“Me impactó mucho un adoptado en Suecia que es policía y logró encontrarse con su madre biológica”, adelanta Leighton quien a sus palabras y sin revelar muchos detalles apunta que: “fue muy linda esa historia, porque él tiene una reflexión muy interesante”.

“Él tuvo mucha sensibilidad de acercarse a su familia (adoptiva) para entender, para tratar de comprender su historia, para acercarse a su madre biológica teniendo una familia en Suecia”, cuenta, apuntando también al problema interno de algunos personajes.

“Estos encuentros fueron muy difíciles en cuanto al idioma, el reconocerse, pero también sentir que los adoptados están completando parte de su historia es muy potente a nivel de ser humano”, reflexiona el director.

Aun así asegura que “los casos más difíciles fueron los que ocurren cuando la persona inicia su viaje”.

A palabras de Leighton, la historia de cada uno de estos niños “son heridas personales”, donde “cada relato tiene un fin que no va solo en encontrar o no a tu padre, tu madre, familia, sino de saber qué es lo que pasa, por qué buscan”.

“Me llamó también la atención la historia donde, sin encontrar, una mujer en Suecia persiste, continúa, trabaja su búsqueda, y eso me impresionó: su persistencia”, rememora brevemente, para apuntar otro caso totalmente diferente.

Asimismo narra la historia de Margarita, quien vive en Italia. Y es que, a diferencia de muchos de sus compatriotas, ella fue abandonada por su familia biológica y acabó en la calle.

Sin saber cuánto tiempo estuvo sin hogar, Margarita acabó viviendo con una familia italiana. “Hoy ella es psicóloga y aconseja en los procesos de adopción en Italia”, comenta Leighton.

En eso, apunta que ella “tiene una reflexión potentísima de contar su experiencia a otras personas que están adoptando niños y niños que son adoptados”.

“Y es que los niños nunca terminan de ser adoptados. Es por la desadaptación; porque hay vacíos de historia en la infancia, hay algo genético que te hace ruido”, reflexiona.

Una línea similar se escucha en el adelanto de la serie, donde, uno de los adoptados menciona que “yo tenía como cuatro años y ahí, más o menos, empezaron mis primeras preguntas: ¿Por qué yo soy diferente? ¿Por qué tengo otro color de piel?”.

La reflexión en torno a los adoptados irregulares

Sin embargo no todo son historias de las familias biológicas, y es que Leighton no para de recordar a una de las familias francesas que realizaron un particular mea culpa con su hija.

“Hay padres adoptivos que me impresionaron. Uno de ellos fue un francés que cuenta como fue criar a su hija, asumiendo los errores que él cometió”, explica.

De acuerdo a su relato, el hombre “siente que le hicieron mucho daño y eso no lo reconoce cualquier padre, porque siente que se equivocó mucho”.

Uno de esos errores, cuenta, fue haber negado la historia de su hija. “Cuenta que él hablaba español, su señora sabía español, ellos hablaban el idioma, pero decidieron que hablar en español entre ellos era algo solo de ellos, no le compartieron a ella el idioma”, menciona.

Adoptados: La historia que nos falta debutará en las pantallas de TVN el sábado 12, a las 22:30 horas. La serie contará con seis capítulos que se emitirán semanalmente.

Sobre estas investigaciones, Leighton afirma que continúa con una sensación de que esto es solo la primera parte de algo mucho más grande. “Hay muchas aristas, además de que no sabemos qué pasará ahora con los protagonistas, por ejemplo, que comienzan a investigar sus raíces. ¿Los encontrará? No lo sabemos”, cierra.