El bullado caso judicial de la familia Calderón Argandoña sigue dando de qué hablar. Este jueves, en el matinal Bienvenidos (Canal 13), el presentador Amaro Gómez-Pablos salió a aclarar por qué Raquel Argandoña no se encontraba en el set mientras discutían sobre su familia.

Recordemos que Hernán Calderón, hijo de Argandoña, fue formalizado por parricidio frustrado luego de haber, presuntamente, atacado a su padre del mismo nombre con un cuchillo en un departamento de Las Condes.

Tras los hechos, la Corte de Apelaciones de Santiago determinó que el joven deberá cumplir la medida cautelar de prisión preventiva, por lo que se encuentra internado en el penal Santiago 1 a la espera de que finalice la investigación del Ministerio Público.

Mientras en el espacio televisivo discutían sobre la nueva declaración de Raquel Calderón, hija de Argandoña y hermana de Hernán, la comunicadora no estuvo en pantalla. Por esta razón es que Gómez-Pablos decidió tomarse un tiempo para aclarar la situación a la audiencia.

Captura | Canal 13

“Quiero transparentar algo que ha sido propio de nuestra dificultad y es importante decirlo (…) Simpatice uno o no con Raquel Argandoña, no es un misterio que ella trabaja aquí en el matinal“, comenzó el presentador.

“Nosotros como canal o como programa podríamos tener distintas aproximaciones a este asunto. Lo que ocurre es que como (Raquel) está en un cuadro emocional severo y pasando por una etapa de dificultad extrema. Uno podría tenerla aquí presente, para discutir este mismo caso como si fuera prácticamente primera fuente y acceso a exclusivas”, añadió.

“(A Raquel) siempre se le ha dejado en absoluta libertad de acción, en respeto a su condición psicológica y emocional, pero también por la consideración de la objetividad o ecuanimidad. Tratar de ser justos”, dijo, agregando que por esa razón es que constantemente intentan contactar a la contraparte, la presunta víctima Hernán Calderón padre.

Más tarde, al cambiar de tema, la comunicadora no apareció en pantalla.

La mañana de este miércoles, el querellante Hernán Calderón pidió recalificar el delito cometido por su hijo, de parricidio frustrado a lesiones graves en contexto de Violencia Intrafamiliar.

Con esto, si la Fiscalía decide reformalizar al imputado, el joven podría arriesgar presidio menor en su grado medio, una pena que va desde 541 días a 3 años y un día, la que, por cierto, es mucho menor a la atribuida a un delito de parricidio frustrado.