En el comentado libro, se revive que varios clientes de Parived lo acusaron de estafa, e incluso lo habrían intimidado enviándole a un ex gente de la CNI para cobrar sus deudas.
El libro Caso Relojes, de Laura Landaeta y Diego Ortiz, está dejando más polémicas de las que ya se conocían, la última de ellas involucra a Álvaro Corbalán, un exagente de la Central Nacional de Informaciones (CNI).
Según se recuerdan los autores en el libro, una popular actriz habría contratado a Corbalán para cobrar una deuda a Parived.
En la página 28 del libro, los autores aseguran que en 2016, Parived y su esposa Tonka Tomicic comenzaron a vivir, lo que tildaron como, un “debacle económico”, debido a fallas en los negocios de Marco Antonio López.
Esto se habría llevado parte del capital de la pareja e incluso habría sido perseguidos por acreedores, como, por ejemplo, Mercedes Benz, caso que fue ampliamente cubierto por la prensa.
Las cosas comienzan a ir de mal en peor. Tonka y su hermana son denunciadas de estafa por su madrastra debido a los derechos de herencia de su padre; mientras que los clientes de Parived hacen lo propio.
Parived empieza a ser acusado de estafa por clientes que dicen haber adquirido piezas de arte falsas, o por personalidades que le vendieron algunas antigüedades que él se negaba a pagar.
Dicen fuentes del espectáculo que una actriz muy conocida le habría enviado incluso al ex-CNI Álvaro Corbalán, hoy preso en Punta Peuco, a cobrar por un respaldo de cama antiguo que se negaba a pagar.
- Cita Libro Caso Relojes
¿Álvaro Corbalán amedrentó a Parived?
No obstante, Álvaro Corbalán, un militar con el grado de mayor, parte de la policía secreta asociada a la dictadura militar, ingresó a prisión en 1991 por violación a los derechos humanos,con cadena perpetua, más otras, por las que suma 100 años de cárcel.
Incluso se le impidió asistir a los funerales de su madre Marta Castilla Geisse, fallecida el 9 de octubre de 2015.
Corbalán, además, estuvo recluido en diferentes centros de detención, comenzando en un recinto militar —cabañas del Batallón de Policía Militar (BPM); el Penal Cordillera; el Penal de Punta Peuco; la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago, y de regreso, a Punta de Peuco en 2017.
Por lo que aquel rumor parece complejo de poder confirmarse.
