Aunque se respetaban mutuamente, la relación que comenzó en buen pie se fue rompiendo con los años.
Tras la gran conmoción por la muerte de la Reina Isabel II este jueves, muchos seguidores de la realeza británica recordaron su rumoreada compleja relación con la princesa Diana de Gales, también conocida como Lady Di.
De acuerdos a los biógrafos, la primera impresión de la monarca respecto de la plebeya Diana Spencer habría sido muy buena, no obstante, su percepción habría cambiado luego de su matrimonio con Carlos.
“La reina la encontró encantadora y apropiada”, asegura Tina Brown, quien escribió la biografía The Diana Chronicles.
Sin embargo, como adelantábamos, con el tiempo el vínculo se habría tornado más complejo, aunque la reina Isabel nunca se refirió abiertamente sobre ello.
“Según todos los informes, la reina inicialmente aprobó a Diana. Sí, ella era una plebeya. Pero ella era una plebeya de clase alta”, asegura un artículo de The Washington Post.
Pero tras casarse con el príncipe Carlos, Lady Di se habría alejado de su suegra porque le parecía intimidante.
“Encontró a la reina agradable pero aterradora. Las tensiones surgieron entre Diana y la familia real, incluida la reina, cuando su matrimonio tuvo problemas y luego acaparó a los tabloides. La relación empeoró cuando Diana sufrió de bulimia”, señala el medio estadounidense.
Diana habría señalado al biógrafo Andrew Morton que durante una conversación con la reina, le indicó que la razón por la que el matrimonio con Carlos fracasó fue porque su hijo “estaba pasando por un momento muy difícil con mi bulimia”.
“Y me hizo darme cuenta de que todos veían eso como la causa de los problemas matrimoniales y no como uno de los síntomas”, habría indicado Diana a Morton. Pese a ello, la princesa habría seguido tratando de confiar en su suegra.
Pero tras los rumores de infidelidad de Carlos a Diana y los problemas evidentes en la relación, la reina Isabel II definitivamente cambió su actitud hacia la princesa.
“Frente a una situación que se escapaba de su control, la reina se retiró del problema y comenzó a ver menos a Diana”, escribió la biógrafa Ingrid Seward en el libro The Queen and Di.
La reina Isabel no fue quien decidió quitarle el título a Diana
Fue en 1992 cuando Diana y Carlos, finalmente, decidieron separarse, pese al escándalo mundial que eso provocaría. La Reina autorizó la ruptura del matrimonio y el príncipe Felipe intentó actuar como mediador.
Sin embargo, ambos tenían una furia contenida el uno contra el otro. Carlos se vengó quitándole todos los títulos a Diana, incluyendo el de “Su Alteza Real”, el cual ella quería mantener, pues de lo contrario tendría que hacer una reverencia no solo ante la Reina, sino que también ante su exesposo e hijos.
Pese a que Isabel II había permitido que la princesa mantuviera aquella distinción, Carlos se empeñó en negárselo, y en su inocencia el príncipe William (que en ese momento tenía 10 años) le prometió a su madre que cuando él fuera Rey, le reinstauraría aquel título.
La revancha de Diana vino años después. En 1995 concedió una sincera, cruda y polémica entrevista al periodista de BBC Martin Bashir.
En dicha conversación, la primera en solitario desde su matrimonio, la princesa habló de todo lo vivido en los últimos 15 años, incluyendo la infidelidad de su esposo, su intento de suicidio, los celos de Carlos por la atención mediática que ella recibía, su bulimia y muchas otras cosas.
La entrevista se mantuvo en completo secreto y ni el palacio de Buckingham ni los ejecutivos más altos de la cadena tuvieron acceso a ella.
Tras la polémica entrevista, menos de un mes después de que saliera al aire, la Reina escribió a la pareja aconsejándoles que se divorciaran definitivamente.
Los verdaderos sentimientos de la Reina Isabel II por la princesa Diana de Gales
Pero pese a las asperezas y distante relación, al parecer la reina seguía teniendo una buena opinión de la denominada “Princesa del pueblo”.
Tras la muerte de Lady Di el 31 de agosto de 1997 en un accidente automovilístico en París, muchos indicaron que tanto Isabel II como su hijo, y exmarido de Lady Di, Carlos, no lograron empatizar con el sentir del pueblo.
Sin embargo, una carta revelada hace unos años por la BBC probaría algo muy diferente al pensar de la población, ya que en esta se observa cuál fue el sentir de la monarca de Reino Unido por aquellos años.
En uno de los párrafos, la reina expresó cierto grado de admiración por Diana Spencer, al declarar que su muerte fue “una gran pérdida para el país”.
“Fue terriblemente triste, y ella es una gran pérdida para el país. Pero la reacción pública a su muerte, y el servicio en el Abbey, parece haber unido gente alrededor del mundo de una manera bastante inspiradora”, escribió la monarca.
Esta misiva fue enviada por Isabel a su amiga personal, Lady Henriette Abel Smith, como respuesta a una carta de condolencias que había enviado la última tras el deceso de Diana.
En otro párrafo, la monarca expresó la admiración que sintió por la reacción de sus nietos, los pequeños William y Harry, a quienes catalogó de “valientes”.
“William y Harry han sido muy valientes y estoy muy orgullosa de ellos”, expresó la reina en la oportunidad.
En 1997, cinco días después de la muerte de Diana de Gales, y debido a la presión de la prensa junto con el pueblo británico, la Reina Isabel II dio un discurso en vivo por televisión, en el cual expresó sus respetos a Lady Di, a quien declaró como “un ser humano excepcional”.
Cabe señalar que por protocolo, los miembros de la familia real no deben manifestar sus emociones en público.
