Este sábado se confirmó la muerte del actor escocés Sean Connery a los 90 años, quien interpretó al reconocido James Bond en la saga 007.

La noticia fue confirmada por la familia de Connery, aunque sin entregar detalles sobre la causa. En 2009, el propio actor había señalado en una entrevista que fue diagnosticado con una dolencia cardíaca.

Nació como Thomas Sean Connery en 1930, siendo hijo de un camionero y una limpiadora de baños. Vivió la pobreza en su niñez y se retiró de la escuela a los 13 años.

Un artículo publicado en 2005 por el medio local The Scotsman titulado “De la cooperativa con amor… los días en que Sir Sean ganaba 1 libra a la semana“, reveló que el hombre comenzó su vida laboral como lechero.

En efecto, el periódico recogió datos luego que la Sociedad Cooperativa Escocesa de Midland (Scotmid, por su sigla en inglés) cerrara su sede por más de 130 años en Fountainbridge. La cooperativa había sido fruto de una fusión de St Cuthbert’s y Dalziel, en los años 50.

Fue en ese momento que se descubrieron registros que indicaron que Connery había empezado a trabajar en St Cuthbert’s el 20 de julio de 1944, cuando tenía recién 14 años.

Los documentos indicaban que el fallecido actor ganaba cerca de 1,05 libras de la época a la semana, desempeñándose como trabajador de transporte de lácteos, aunque antes había trabajado en carretillas y como jinete junior.

El actor en tiempos de grabación de la saga

En enero de 1950 dejó la empresa y para 1951 ya estaba siendo ayudante en el King’s Theatre de Edimburgo, con lo que habría empezado a desarrollar su carrera.

“No tenía idea de que estaban allí (los informes)”, dijo el presidente de la cooperativa, Hollis Smallman. Añadió que “era una de las cientos de fichas que contenían detalles de trabajadores que se remontaban a las décadas de 1930 y 1940. Es fascinante”.

Más tarde, con su imponente carrera, el actor se transformó en uno de los mejores pagados de la industria. El diario español El País consigna que por su participación de dos minutos en la película de 1991 Robin Hood: Príncipe de los ladrones se embolsó 220 mil euros (casi 200 millones de pesos chilenos).

Su filmografía indica que la primera producción oficial en la que participó fue Lilacs in the Spring de 1954. Su gran salto a la fama fue en 1962, con el estreno de la primera película de James Bond. Luego vinieron siete entregas más de esta saga, que lo potenciaron aún más.

Por su importante trayectoria, la reina Isabel II de Inglaterra le concedió el título de Sir en julio del 2000, cuando tenía 69 años. La ocasión fue polémica pues el actor se había mostrado a favor de la causa independentista de Escocia.

Aún así, Connery apartó sus ideales y se arrodilló ante la monarca, para recibir el título, mediante una espada que la reina posó sobre sus dos hombros.

“Es un gran honor para Escocia. Este es el día más orgulloso de mi vida”, dijo a los medios tras la ceremonia.