A principios de julio, el presidente estadounidense, Donald Trump, aseguraba que ya tenía comprador para las operaciones de TikTok en Estados Unidos. Sin embargo, en ese momento, no trascendieron los nombres porque se necesitaba de la aprobación de China para seguir adelante.
Tras dos meses de negociaciones se conoció que las operaciones de la app serían adquiridas por un consorcio que incluye a Oracle, de la cual es dueño el multimillonario empresario Larry Ellison, Andreessen Horowitz y la firma de capital privado Silver Lake Management LLC.
Tras informar los resultados de Oracle y revelarse varios contratos millonarios, la fortuna de Larry Ellison llegó a superar por unos momentos a la de Elon Musk, según el índice de millonarios de Bloomberg, durante el 10 de septiembre.
Según lo informado por Bloomberg Línea, citado por Fortuna (Perfil), el acuerdo marco, desvelado el lunes 15 por altos funcionarios estadounidenses y chinos tras dos días de conversaciones en Madrid, crearía una versión estadounidense de la popular aplicación de medios sociales.
Larry Ellison estaría entre los compradores de TikTok en EEUU
En caso de concretarse, el acuerdo resolvería un punto sumamente conflictivo durante los últimos años en la relación entre Pekín y Washington.
Asimismo, podría ayudar a configurar el destino de la empresa privada más valiosa de China, una startup de US$400 mil millones cuyo producto de video consiguió unos 170 millones de usuarios estadounidenses, en su mayoría jóvenes, antes de ser tachado de amenaza para la seguridad nacional.
El acuerdo inicial estipulaba que la participación de ByteDance Ltd. en TikTok debía caer por debajo del 20% para satisfacer una ley estadounidense de 2024. En la misma se exigía a la empresa que desinvirtiera o se enfrentara a una prohibición en el mercado estadounidense.
Una vez finalizado, los usuarios de la aplicación migrarían a una nueva plataforma, dijo una persona familiarizada con los contornos del acuerdo.
Ingenieros estadounidense de Tik Tok estuvieron trabajando en la nueva aplicación para que el traspaso sea lo más natural posible. Además, como parte del acuerdo marco, ByteDance concederá la licencia de la tecnología que hay detrás, según declaró un funcionario de Pekín.
El papel de Oracle
Desde el lado estadounidense, se prevé que Oracle siga prestando servicios en la nube a TikTok, un negocio que se ha convertido en una fuente constante de ingresos para la empresa con sede en Austin. Oracle ya trabaja con la plataforma para alojar los datos de los usuarios en EEUU y otros países como parte de una asociación multimillonaria que desde la app bautizaron como Proyecto Texas.
Aun así, persisten muchas dudas como el precio de uno de los negocios más lucrativos de ByteDance y cuánto adquiriría cada posible inversor en virtud del acuerdo.
Según el acuerdo, los nuevos inversores externos poseerían el 50% del negocio estadounidense de TikTok en una unidad que se escindiría de ByteDance.
Sus actuales inversores estadounidenses poseerían alrededor del 30% del nuevo negocio, reduciendo la participación de la firma china a poco menos del 20% y permitiéndole cumplir los requisitos de propiedad de la ley de seguridad estadounidense.
El plan sigue en gran medida la línea de una propuesta que había estado a punto de llegar a un acuerdo con la compañía a principios de este año, pero que se desbarató cuando China retuvo su aprobación tras la decisión de Trump en abril de imponer amplios aranceles a la segunda mayor economía del mundo.
Nombres que sonaron para comprar con TikTok
En enero de este año, Elon Musk todavía aliado cercano de Trump, fue uno de los nombres barajados.
En abril, el New York Time, informaba que sería el propio dueño de Amazon, Jeff Bezos, quien presentó una oferta a la Casa Blanca para comprar la aplicación. Según lo trascendido, Amazon había enviado su propuesta en una carta al vicepresidente JD Vance para que este ayudara a facilitar la venta de las operaciones estadounidenses de la plataforma de video.
A mediados del año pasado, cuando comenzaba el conflicto con Tik Tok, aparecía el nombre de Frank McCourt, un inversionista y empresario multimillonario estadounidense como interesado en comprar TikTok con el fin de arreglar internet.