En 2019, Telefónica anunció que unificaría todo su negocio hispanoamericano en una sola filial independiente y que concentraría sus inversiones en sus cuatro mercados principales: España, Brasil, Alemania y Reino Unido.

En una reunión del consejo de administración en Barcelona, se adoptó la decisión de realizar esa reorganización.

De acuerdo a información en aquel entonces publicada por El País, la empresa se concentraría en los negocios de más proyección y en los mercados más consolidados, “huyendo de aquellos que sufren inestabilidad” (Colombia, Chile y Venezuela).

Así, en los últimos días Telefónica comenzó a afinar los detalles para vender su filial en Chile.

Según el medio español El Economista, el grupo estaría buscando reducir su deuda y para ello ha estado trabajando con Citi y Morgan Stanley.

Entre los potenciales compradores figurarían Liberty Latam, Claro, Entel, Borealnet y Novator Partners.

De acuerdo al citado medio, a nivel local esta venta podría provocar una alerta en el ente regulador (Fiscalía Nacional Económica, FNE) en el supuesto de que la principal competencia -Claro, Entel o Liberty Latam (VTR)- sea quien busque cerrar la compra, por motivos de concentración de mercado.

Con respecto a este escenario el presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, dijo en 2019 citado por El País que las operaciones en Latinoamérica “eran hasta hace unos años el motor de crecimiento de la compañía. Sin embargo, las condiciones particulares en estos mercados han impactado en la evolución de los negocios”.

“Si tenemos que reducir nuestra exposición y riesgo en Hispanoamérica, lo haremos. No descartamos ninguna opción”, concluyó el ejecutivo el año pasado.

Malos resultados

Los beneficios del grupo Telefónica se hundieron un 66% en 2019, lastrados por la situación en América Latina y un importante plan de reestructuración en España.

El resultado neto en 2019 fue de 1.142 millones de euros (unos 1.232 millones de dólares), muy por debajo de las previsiones de los analistas interrogados por el estudio de informaciones financieras Factset, que preveía 2.140 millones de euros (2.300 millones de dólares).

Hace poco más de un año, el grupo de telecomunicaciones disponía de una plantilla internacional de 117.300 personas.