El ex trabajador de la automotora alemana es procesado por fraude, expedición de falsos certificados y publicidad engañosa, en el marco de las investigaciones por la manipulación de motores diésel por parte del grupo Volkswagen.

Rupert Stadler (60), ex gerente de Audi, se declarará culpable como parte de un acuerdo con el Tribunal Regional de Múnich, Alemania. Esto en el contexto de los juicios enmarcados en el caso “Dieselgate“.

El caso se remonta a 2015, cuando se descubrió que el gigante automotriz, grupo Volkswagen, de la cual Audi es filial, habría adulterado 11 millones de vehículos para presentar cifras de emisiones favorables, provocando un terremoto dentro de la industria europea del automóvil.

En este sentido el antiguo director de la compañía compadeció junto a otros ex ejecutivos, aunque él se alza como el principal acusado en el primer juicio penal abierto de Alemania al respecto.

A cambio de su confesión, la que debería producirse en dos semanas y es requisito previo para que se valide el acuerdo de culpabilidad, se le daría una pena condicional de prisión de dos años máximo y una multa de 1,1 millones de euros ($980 millones de pesos aproximadamente).

Stadler habría negado cualquier responsabilidad en el caso de manipulación de los motores diésel, justificándose en que sus técnicos lo habrían engañado.