El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) citó a declarar al representante del gimnasio Sportlife de Bandera, en Santiago, el cual cerró de forma inesperada el 31 de octubre.
La gerencia del local señaló mediante un texto -que se puede apreciar en la página del gimnasio- que la decisión viene luego de enfrentar “dificultades de sostenibilidad para la continuidad del negocio”, y que a los días siguientes les enviarían a sus clientes las opciones para continuar asistiendo a otros Sportlife.
Con ello, más de mil personas que asistían regularmente al gimnasio resultaron afectadas.
Sernac exige que declare el representante legal del Sportlife Bandera
Según afirmó el Sernac en un comunicado, la situación imprevista “representa un perjuicio para las y los consumidores que cuentan con planes contratados en dicha sede, ya que las demás sedes están alejadas del centro de Santiago”.
Por ello, y haciendo uso de las atribuciones del artículo 58 de la Ley del Consumidor, el Servicio exigió que el representante legal explique de forma detallada las razones tras el cierre.
También deberá informar cuáles fueron las medidas que se adoptaron para responder a los afectados, considerando que se podría dar un incumplimiento de los contratos con los usuarios en el caso de quienes se derivó a otra sucursal, según el organismo.
En caso de que la persona no llegue a declarar, el Sernac puede pedir que se arreste a la persona y obligarla a que entregue la información solicitada.
Por otro lado, el martes el Servicio inició un Procedimiento Voluntario Colectivo (PVC) con Western Union, luego que se hubieran acumulado 1.950 reclamos en casi cinco años, por inconvenientes al contratar el servicio de remesas.
Uno de los problemas era la falta de información sobre fallas en las transacciones, las cuales en muchos casos las personas se enteraban de una transacción fallida cuando le preguntaban al destinatario si recibían el dinero o no. También se constataron retrasos en las devoluciones de los dineros cuando los envíos fallan.