El mayor banco español, el Santander, comunicó este viernes a los sindicatos su proyecto de eliminar 4.000 puestos de trabajo en España, indicaron fuentes del sindicato Comisiones Obreras (CCOO).

Aparte de esto, “unos 1.000 empleos” serán reorganizados a nivel interno, indicó otra fuente cercana a las negociaciones, y destacó que las supresiones de puestos de trabajo se deben principalmente al crecimiento de servicios digitales, una transformación que “se ha acelerado con la pandemia” de coronavirus.

“El uso de canales digitales subió casi un 50% en 2020”, y el banco espera “que se reduzcan las transacciones en oficinas a la mitad en los dos próximos años”, explicó la misma fuente.

Banco Santander anunció en 2019 que quería reducir sus costes en 1.200 millones de euros anuales durante los próximos años.

Al mismo tiempo, la entidad dijo que preveía destinar más de 20.000 millones de euros en un período de cuatro años a la transformación digital del negocio.

El Santander ya suprimió en 2019 más de 3.200 empleos, en el marco de una reestructuración vinculada a la absorción del Banco Popular dos años atrás, y que incluía igualmente el cierre de 1.150 oficinas.

Pese a la mejoría de las cuentas en el tercer trimestre, Banco Santander acusó con fuerza el impacto de la pandemia, con una pérdida de más de 9.000 millones de euros en los nueve primeros meses del año, la primera en la historia del grupo presidido por Ana Patricia Botín.

El Santander no es el único que quiere suprimir empleos en España.

El martes, el quinto mayor banco del país, el Sabadell, anunció su intención de eliminar 1.800 empleos como parte de una amplia reestructuración.

Los bancos españoles, devastados por la crisis financiera de 2008, prescindieron en la década siguiente de cerca de 100.000 trabajadores, lo que equivale al 37% del personal del sector en 2008, según datos de Comisiones Obreras.